jueves 25 de abril de 2024

LOCALES | 15 ene 2020

ARCHIVO SEMANARIO

Hoy se cumplen 20 años del brutal asesinato de Claudia Silvina Colo

El 15 de enero de 2000 fue estrangulada con un cable en la compañía de seguros donde trabajaba. Su cuerpo fue hallado al día siguiente dentro de dos bolsas de consorcio. José Luis Correa fue condenado a prisión perpetua por el delito de homicidio calificado “criminis causa”.


TAGS: CORREA, COLO, DANA

Por: Semanario

Se cumplen hoy 20 años de la ausencia de Claudia Silvina Colo, la primera de las dos hermanas que encontró la muerte en forma imprevista, el 15 de enero de 2000.

La joven tenía 25 años y fue estrangulada con un cable un sábado a la tarde, en la compañía de seguros donde trabajaba. Su cuerpo fue hallado envuelto por dos bolsas de residuos. El autor del atroz crimen fue condenado a prisión perpetua por el delito de homicidio calificado “criminis causa”.

Claudia Colo y José Luis Correa eran compañeros de trabajo en la aseguradora Unión Berkley, ubicada en Rivadavia 232. Por entonces, el hombre tenía 34 años, era programador informático y conocía muy bien el movimiento de dinero que había en la empresa, ya que estaba a cargo de los sistemas y había diseñado todas las planillas en las que se volcaba la información. El sábado 15 de enero de 2000, Correa decidió ejecutar un plan y fue a la empresa.

Nunca se supo si entró a la oficina con llaves propias y se encontró con Claudia en el lugar, o si ella, teniendo en cuenta que era una persona de confianza, lo dejó ingresar. Una vez en el interior, se reconstruyeron luego los hechos que se sucedieron: Correa golpeó a la joven varias veces y la estranguló con un cable. Luego acomodó el cadáver atándole los pies y las manos, y lo metió en dos bolsas de residuos que dejó sobre el costado de una heladera.

Poco más tarde, escapó del lugar llevándose dinero en efectivo, cheques en blanco y documentos de identidad. Dos días después, el 17 de enero, el programador dio un nombre falso y pidió un remís para viajar a Chacabuco, donde iba a visitar a unos familiares. Pero una vez allí y luego de un rato de espera, le pidió al chofer que lo llevara a Buenos Aires.

Para entonces, la Policía ya estaba tras los pasos del hombre como sospechoso y los investigadores lo habían llamado para tomarle testimonio. El remisero que lo llevó, recordó incluso que Correa le comentó durante el viaje que se había enterado de que habían matado a una chica en Junín.

Al aceptar el viaje a la Capital, el chofer avisó en la remisería. Allí, el cambio de destino resultó sospechoso y dieron aviso a la Policía. Al llegar a la altura de la localidad de San Andrés de Giles, el destacamento vial detuvo el vehículo y le pidió a Correa que se identificara.

Otra vez, el sospechoso buscó evadir el control dando un nombre falso. El pasajero quedó detenido: llevaba encima el dinero (4.800 pesos), varias llaves que correspondían a la cerradura de la puerta del local de la aseguradora donde trabajaba, cuatro chequeras en blanco, siete bolsas de residuos negras, una pistola calibre 22 y cuatro DNI de ciudadanos de Chacabuco. Quedó detenido.

Ocho meses después, el 17 de septiembre de 2000, fue condenado a prisión perpetua por el delito de homicidio calificado “criminis causa” (matar para ocultar otro delito, en este caso, el robo de dinero).

GRAN REVUELO

José Luis Correa fue condenado a cadena perpetua en septirmbre de 2000.

En mayo de 2017, la decisión de la titular subrogante del Juzgado de Ejecución Penal del Departamento Judicial Junín, Claudia Dana, sacudió la ciudad: le otorgó la libertad condicional a José Luis Correa.

Tal fue el estupor, que intervino la misma justicia y días después, la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal revocó la medida, por lo cual el asesino debió continuar entre rejas.

Era la tercera vez que este hombre, devenido abogado tras los estudios realizados dentro de la cárcel, solicitaba el beneficio. La misma jueza que en otra oportunidad se lo negó, decidió otorgárselo porque, según su apreciación, "evolucionó a nivel psicológico y psiquiátrico".

LA MISMA FAMILIA

A la tragedia atravesada por la familia Colo, le siguió otra de similares características 12 años después. La hermana de Claudia, Sandra Colo, también fue asesinada, el 16 de agosto de 2012, en un pelotero para fiestas infantiles ubicado en Alem al 300.

Por ese crimen detuvieron a un mecánico que en 2015 fue condenado a reclusión perpetua.

Una familia ligada al dolor, pero siempre atenta a que se cumplan las condenas fijadas a los asesinos. Es incierto cuánto tiempo más se podrá retener preso a Correa, tras 19 años de condena efectiva. Pero seguro, en cualquier proceso que se inicie, allí estarán presentes los papás de Claudia y Sandra, para garantizar la justicia.

Ver "Forenses, cuerpos que hablan", programa emitido por Canal 9, con el informe detallado del caso 

Juan Colo: “que cumpla la condena”

En una entrevista concedida a Semanario en agosto del año pasado, al cumplirse un nuevo aniversario del crimen de Sandra, Juan Domingo Colo habló sobre el asesino de Claudia: “José Luis Correa tuvo salidas transitorias y después se las sacaron porque comprobaron que no hacía afuera lo que decía. Por lo que se tiene que cumplir los 25 años ahora. Primero dijeron que podían ser 22 y 3 a negociar pero con el asunto que mintió, según tengo entendido, se le cayó todo encima. Pero ya está. Lo único que queremos es que la justicia cumpla y que termine la condena como corresponde”. 

 

 

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