Un nuevo y grave hecho de inseguridad tuvo lugar ayer por la mañana, entre las 9 y 11.30, cuando la casa “visitada” no tenía moradores. Tras barretear una puerta, delincuentes no identificados se llevaron al menos 5 millones de pesos, que se encontraban en el interior.

La vivienda está ubicada en Cabrera 429, y es propiedad de Pablo Marcelo Sabartés, titular de la empresa de turismo Maliyo.

En el caso, interviene la Fiscalía a cargo de Carlos Colimedaglia. 

No hay más datos disponibles sobre este nuevo caso de “escruche” en Junín, que se produjo a plena luz del día y en una zona casi céntrica. 

Las autoridades municipales a cargo de la Secretaría de Seguridad ordenaron mantener un fuerte hermetismo en torno al caso, por lo cual no fue posible obtener más información acerca de los mecanismos utilizados por los delincuentes para apoderarse del botín.

Al parecer, con la no difusión de los hechos a través de los medios, los responsables del área creen que los mismos no toman estado público y los vecinos no se alarman, todo lo contrario a lo que debería practicarse desde el Estado como sería advertir sobre la grave situación de inseguridad por la que atraviesa la ciudad.