jueves 28 de marzo de 2024

LOCALES | 18 mar 2020

Mantén la calma Junín

Cuando la atención del mundo está centrada en la epidemia del coronavirus, “mantén la calma” debiera ser la frase acertada para no caer en el pánico que se genera por la sobreinformación y las falsas noticias que parten de alguna usina interesada. Paranoia vs prevención. ¿Qué alarmas debemos prender antes de alarmarnos nosotros?


Por: Semanario

Keep Calm (“and carry on” y sigue adelante) reza el conocido afiche que nació como frase motivacional en la segunda Guerra Mundial.

“Mantén la calma” debiera ser la frase acertada para enfrentar al Coronavirus y no caer en el pánico producto del desborde que se genera por la sobreinformación y las falsas noticias que parten de alguna usina interesada.

La Organización Mundial de la Salud ha llamado diariamente a los países a actuar y ha hecho sonar la alarma del COVID-19 declarando la “pandemia”, una palabra fuerte y que puede resultar motivacional en tanto y en cuanto no cause miedo en mucha gente hasta paralizarla.

Probablemente el próximo invierno en Junín haya más casos de gripe común que el total de casos de coronavirus que se registren en toda la Argentina. Por lo pronto desde SEMANARIO tratamos de informar con criterio sin dejarnos avasallar por el desborde mundial que pone los números fríos por encima de los datos de prevención que seguramente ayudarán más que algunas noticias agoreras, para acabar con un virus que ya está identificado y pareciera no ser tan bravo como lo pintan.

La información al respecto es sumamente dinámica, pero en líneas generales no se ha apartado demasiado de lo que representa enfrentar a un virus bastante similar al de la gripe común.

En Junín, los centros de salud están en intercomunicación permanente y siguiendo las directivas del ministerio de Salud bonaerense. Cada caso sospechoso hace saltar las alarmas respectivas, pero es indudable que lo primero que debemos tener en cuenta es la información veraz y acertada que pueden proveer sólo los especialistas

Hay, por alguna razón inentendible, una base de datos alarmista y negativa, cuando nada nos debiera hacer pensar en ese sentido si es que realmente hacemos un análisis criterioso de la situación.

Sin minimizar, pero tampoco caer en ese relato trágico cercano a un apocalipsis.

Tal vez lo primero que valga considerar es que en China, lugar desde donde partió el foco, el contagio ya está mermando y son cada vez menos casos. Por lo cual demuestra que existen mecanismos para revertir la situación.

Dr. Mario Cuitiño, epidemiólogo juninense.

El Dr. Mario Cuitiño, en una nueva entrevista con SEMANARIO, actualizó algunos datos y explicó que a esta altura el virus “ya está identificado y se sabe cuáles son sus características”.

“No quedó del todo claro si se declaró a partir de los murciélagos o no, pero ya se identificó genéticamente, no tenemos métodos de identificación en Junín, pero ante cualquier caso sospechoso podemos pedir los estudios en La Plata, que para nosotros es el lugar de referencia”, explicó.

En la Argentina hay métodos diagnósticos. Lo que no se puede es hacer diagnósticos si no hay síntomas. En rigor, si una persona está recién llegada de Italia y quiere saber si trajo el virus no podrá saberlo, salvo que tenga al menos fiebre y tos seca, que son las principales características de sospecha.

“En China la epidemia está casi en su etapa final”, destacó el especialista en infectología que se desempeña en nuestra ciudad.

Cada vez hay menos casos en el país de origen del virus por lo que Cuitiño consideró que “si hacemos una analogía, entendemos que esto es algo que viene y se va y no es una cosa que queda de forma permanente”.

Muchas de las enfermedades virales tienen ese comportamiento produciendo una curva y quizás  esa tendencia hacia la disminución tenga que ver con las medidas preventivas que se implementan en los países luego de la eclosión de la enfermedad, por lo que dichas medidas no estarán de más, aunque no es para nada indicado generar alarmas innecesarias y menos aún pánico.

“El virus de la gripe o influenza que tenemos cada año, hace el mismo ciclo. En el invierno hay un montón de casos y luego se empieza a retirar”, aclaró el médico.

Que el Coronavirus haya llegado al país en verano casi otoño, probablemente haya influido en forma positiva ya que estas enfermedades son más comunes en los meses de mayor frío.

De todos modos, Cuitiño se mostró cauteloso al indicar que “apareció en el invierno en el hemisferio norte y no sabemos si nosotros vamos a repetir la historia en nuestro invierno, como ocurre con la influenza. Es difícil de predecirlo porque recién apareció”.

Otro punto en el que hizo hincapié el especialista, es que “la mayoría de los casos de Coronavirus son leves en más del 90 por ciento de los casos. Hay reportes disímiles respecto a la tasa de mortalidad, en algunos casos es el 1% en otros el 2% y hasta reportes del 4%, pero depende de la edad”.

En los niños prácticamente no se ha registrado mortalidad y la enfermedad es muy leve. La gripe afecta a los bebés pequeños pero el coronavirus no se manifiesta de ese modo.

“Tampoco ha mostrado ser grave en mujeres embarazadas algo que si produce la gripe, por lo que las gestantes deben vacunarse en los próximos días para esta temporada”, recomendó Cuitiño.

En adultos jóvenes y sanos la mortalidad está por debajo del 1%, la mayor mortalidad se registra por encima de los 70 u 80 años, pero especialmente en personas mayores con enfermedades crónicas como diabetes o que están cursando una quimioterapia y tienen debilitadas sus defensas.

A pesar de que aún no hay vacuna contra el Coronavirus, Cuitiño recomendó vacunarse contra la gripe, ya que esto generará que no haya tantos casos de enfermedad en invierno. “La vacunación para la influenza sigue vigente para mayores de 65, mujeres embarazadas y niños menores de dos años”, sostuvo.

Se espera que para la próxima semana esa vacuna antigripal ya llegue a Junín.

UN VIRUS VULNERABLE

Otro dato positivo que añadió el experto es que “el virus muere fácil, no necesito ningún desinfectante especial. Con lavandina común poniendo cuatro cucharadas de té por litro de agua es suficiente para la higiene diaria. En las manos el clásico alcohol en gel o de lo contrario agua y jabón resulta efectivo. Seguramente el primero es más práctico para manejarse cuando uno sale de casa”.

Respecto al tratamiento no hay nada concreto aunque están en estudio algunos antivirales.

La prevención tiene dos medidas esenciales: La higiene de manos, evitar tocarse la cara porque el virus no atraviesa la piel, pero pasa a través de los ojos o la boca.

El otro punto es respecto a la persona que está tosiendo. “Si yo mantengo una distancia de dos metros con una persona enferma, por más que no use barbijo ni nada, no me voy a contagiar porque no es un virus que quede flotando en el aire sino que sale a través de las gotas del estornudo y cae al piso”, expresó el entrevistado.

El contagio ocurre en lugares cerrados y mal ventilados, por eso la recomendación es que si hay una persona enferma a quien cuidar, hay que mantener los ambientes ventilados y evitar la cercanía.

El contagio en la calle es muy poco probable, ocurre por lo general en habitaciones con mucha gente. Difícilmente alguien pueda contagiarse por estar en un parque caminando.

Respecto a la ropa, si es que alguien mantuvo contacto con un enfermo, solamente hay que lavarla con jabón en el lavarropas, ni hay que descartarla ni quemarla y nada por el estilo.

“Cuando uno mira las imágenes en otros países debe tener en cuenta algo que ya dejó en claro la comunidad científica y es que no hay una recomendación para el uso del barbijo. Salvo que una persona esté enferma y por usarlo evite contagiar a otro o en el caso de alguien que debe atender a un paciente enfermo en su casa o en una dependencia de atención de la salud. El barbijo a las pocas horas pierde su eficacia por lo que no es recomendable usarlo”, puntualizó Cuitiño.

Hay infinidad de falsas noticias que circulan por las redes sociales y cadenas de mensajes telefónicos que lo único que generan son confusión y miedo.

Ese estado caótico producto de las decisiones que se toman en distintos ámbitos gubernamentales e institucionales, resulta difícil de digerir en cuanto al motivo que lo genera.

Por lo que la pregunta que debemos hacernos es acerca de si semejantes datos “minuto a minuto” fueran dados a conocer cada invierno en relación a la gripe común. ¿Qué pasaría?

Para Cuitiño es así, podríamos entrar en pánico. “Respecto a la gripe común esa información no se proporciona porque no hay un sistema armado como este en el que desde todo el mundo se reportan los casos. Leí los otros días que en Estados Unidos este invierno 19/20 llevaba más de seis millones de casos de influenza, cuando en estos momentos ese país no llegó a tener siquiera mil casos de Coronavirus. Fueron seis millones de casos de gripe sólo en Estados Unidos y llevamos en estos días 300 mil de coronavirus en todo el mundo”. Un dato para ser criteriosos y no hallar demasiada explicación al porqué de las alarmas mundiales.

Las diez básicas

La Organización Mundial de la Salud ha emitido diez recomendaciones específicas para que los ciudadanos, se protejan del coronavirus.

1. LAVARSE LAS MANOS

Lávese las manos regularmente con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón. Tocarse la cara después de tocar superficies contaminadas o a personas enfermas es una de las formas en que se puede transmitir el virus. Al limpiar las manos se puede reducir el riesgo.

2. LIMPIEZA DE SUPERFICIES

Limpie regularmente con desinfectante las superficies como bancos de cocina y escritorios de trabajo .

3. INFORMARSE

Infórmese sobre el COVID-19 a través de fuentes confiables: su agencia de salud pública local o nacional, el sitio web de la OMS o su profesional sanitarios local. Todos deben conocer los síntomas: para la mayoría de las personas, comienza con fiebre y tos seca, no con secreción nasal. La mayoría de las personas tendrá una enfermedad leve y mejorará sin necesidad de ningún cuidado especial.

4. EVITAR LOS VIAJES

Evitar viajar si tiene fiebre o tos, y en caso de enfermarse durante un vuelo, informar a la tripulación de inmediato. Una vez que llegue a casa, póngase en contacto con un profesional de la salud y cuéntele dónde ha estado.

5. CUIDADO AL TOSER O ESTORNUDAR

Si tose o estornuda, hágalo en la manga o use un pañuelo de papel. Deseche el pañuelo inmediatamente en un contenedor de basura cerrado y luego lávese las manos.

6. SI ES MAYOR, EVITAR LAS ÁREAS MUY CONCURRIDAS

Si tiene más de 60 años o si tiene una afección subyacente como una enfermedad cardiovascular, una afección respiratoria o diabetes, corre un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad grave. Podría tomar precauciones adicionales para evitar áreas abarrotadas o lugares donde pueda interactuar con personas enfermas.

7. QUEDARSE EN CASA SI SE ESTÁ ENFERMO

Si no se siente bien, quédese en casa y llame a su médico o profesional de salud local. Él o ella le hará algunas preguntas sobre sus síntomas, dónde ha estado y con quién ha tenido contacto. Esto ayudará a asegurarse de que reciba el asesoramiento correcto, se dirija al centro de salud adecuado y evitará que infecte a otros.

8. CUIDADOS EN CASA

Si está enfermo, quédese en casa y coma y duerma por separado de su familia, use diferentes utensilios y cubiertos para comer.

9. CONSULTAR CON EL MÉDICO

Si tiene dificultad para respirar, llame a su médico y busque atención médica de inmediato.

10. HABLAR CON LA COMUNIDAD Y EL TRABAJO

Es normal y comprensible sentirse ansioso, especialmente si vive en un país o comunidad que ha sido afectada. Descubra lo que puede hacer en su comunidad. Discuta cómo mantenerse seguro con su lugar de trabajo, escuela o lugar de culto.

 

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