jueves 28 de marzo de 2024

OPINIÓN | 22 ago 2017

enfoque

El día del niño siempre es ayer


Por: Redacción Semanario de Junín

Valió la pena el día niño en la Argentina. Por veinticuatro horas pareció volver aquello de ‘los únicos privilegiados’, resurgió el imperativo moral de que ‘con los pibes no’ y muchos sintieron que ‘los chicos son sagrados’, como decían los pueblos originarios.

Pero el día del niño siempre es ayer en estos arrabales del mundo.

El domingo se festejó el día del niño en Argentina. Pero en realidad, siempre el día del niño será ayer. Los diarios dicen que las ventas de juguetes crecieron equis por ciento en relación con el año anterior y que hubo mayor cantidad de productos nacionales. Los gobiernos nacionales, provinciales, comunales regalaron caramelos, juguetes y actuaciones varias. Los parques y las plazas se llenaron de pibes junto a sus familias. Valió la pena el día del niño en la Argentina, decimos a coro.

El desafío es pensar en todos los días de todos los niños y todas las niñas.

Porque los privilegios están claros en los números del presupuesto nacional: la asignación universal por hijo, por ejemplo, es muy inferior al asignado a las grandes empresas en concepto de exenciones impositivas, asistencias crediticias, reintegros y otras yerbas. Los grandes empresarios, cuatro; los pibes, uno. Allí están los únicos privilegiados.

Porque millones de chicos que no escucharon el relato de un cuento de boca de un mayor en los últimos tres años, que no tienen preparada ni la cabeza ni el alma para soñar con un final feliz y modificar aquella historia que empieza con el ‘había una vez’ de todos los días. Que al no escuchar un cuento creen que siempre la realidad será igual y que no tendrán otra posibilidad que no sea la resignación.

Porque el sabor a alfajor de chocolate solamente aparece en el día del niño, el día del niño siempre es ayer en la Argentina del tercer milenio.

Habrá celebración de todos los días de todos los niños de la Argentina el día que se recupere aquella realidad del país hecho a imagen y semejanza de las mayorías, aquella donde la existencia concreta marque que los pibes volvieron a ser los únicos privilegiados, que con los chicos no y que ellos, todos los niños son sagrados.

Hasta entonces, siempre el día del niño será ayer.

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias