Tras los dos créditos tomados en abril y mayo para el pago de sueldos y proveedores, el municipio está pensando en solicitar otro más, para hacer frente a los salarios del mes de junio y aguinaldos. Esto fue adelantado por el propio intendente Pablo Petrecca, en declaraciones periodísticas.

En primer lugar, la Provincia giró 45 millones de pesos, luego llegaron a Junín $ 8.300.000 y no fue adelantado el monto del tercer empréstito que las decaídas arcas municipales solicitarán durante este mes.

Según las propias declaraciones del intendente municipal, se requirió este auxilio económico porque “la recaudación, que se compone de dos partes: la coparticipación que envía la Provincia y las tasas que pagan los vecinos, tuvieron una baja del 40 y 60% aproximadamente. Las arcas municipales sufrieron un deterioro y hay que establecer procedimientos de crisis”.

“Los salarios de los municipales son una de las prioridades, pudimos cumplir hasta ahora con los sueldos de abril y mayo y estamos preparándonos para pagar ya junio y el aguinaldo”, dijo Petrecca.

En este marco, contó que “el primer crédito fue de 45 millones de pesos, que nos permitió pagar esto y los servicios esenciales, y ahora para estar más holgados, solicitamos un crédito de $ 8.300.000. Y seguramente durante junio habrá otro préstamo”, adelantó.

AL ROJO VIVO

Los números de las cuentas municipales están totalmente en rojo. Apenas empezó la cuarentena, el gobierno de Pablo Petrecca –el mismo que se autoproclama como el más transparente y ordenado de la historia- se quedó sin fondos, tal vez por los excesivos gastos originados el año pasado, para hacer frente a la campaña electoral.

Ahora, con la pandemia, la Provincia debió enviarle plata para que pagara los sueldos municipales de abril, no se conoce el destino de las donaciones ni de los depósitos realizados por los juninenses a una cuenta especial abierta, no hay garantías sobre la continuidad de prestación de servicios básicos en la ciudad y ni hablar de obras a futuro, todas las que quedaron en promesas y sueños de los juninenses.

No obstante, siguen sin hacerse públicos los números referidos a los fondos de todos los juninenses y que el Intendente debe administrar. Encima, con la declaración de la emergencia económica, menos cuentas deberá rendir y no sólo los concejales, sino todos los vecinos, seguiremos hundidos en la ignorancia.

Cuando Petrecca se junta con los viejos amigos de Cambiemos, se envalentona y tanto él como sus funcionarios y hasta el cuñado, salen a fustigar al gobierno provincial de Axel Kicillof. Pero después, cuando vuelven al solitario despacho, deben bajar un cambio y reconocer que la Provincia es el único salvavidas que poseen. Para que el barco no se hunda definitivamente, dejando al descubierto que por cuatro años no flotó en base a la propia gestión, sino a las bondades de haber estado bien relacionado con Macri y Vidal.