Ocupando una banca en el Concejo Deliberante, presenté un proyecto de ordenanza en la cual establecía la posibilidad de un servicio de transporte adecuado para personas que sufren una discapacidad motriz, mental o una insuficiencia que por distintos motivos, y que pudieran ser trasladados mediante el uso de vehículos habilitados al efecto y conducidos por personas específicamente autorizadas por la Municipalidad.

Entre otros puntos la iniciativa presentada establecía que el modelo de fabricación no podrá exceder los 20 años de antigüedad, se debía encuadrar en cualquiera de las categorías autorizadas en la ley 24.440, tener un peso neto mínimo de 1.500 Kgs. sin equipamiento, contar con un tacógrafo sellado de fácil lectura y con todos los elementos se seguridad exigidos por la legislación vigente; poseer como mínimo dos puertas con no menos de 0,70 cm de luz libre, más una de emergencia de igual dimensión, en un extremo opuesto a aquellas; tener los elementos de identificación (color, numeración, signo internacional de discapacitados) que establezca la reglamentación; efectuar una completa desinfección cada treinta (30) días, o cuando la autoridad de aplicación lo considere necesario; tener seguro contra terceros y de responsabilidad civil sobre las personas transportadas, contratado con una empresa de primer nivel que al efecto se halle inscripta en la Municipalidad; presentarse a la inspección de la autoridad de aplicación en tiempo y forma cada vez que ella le sea requerida; tener un asiento reservado para acompañantes, en caso que los pasajeros discapacitados así lo requiriesen.

Dichos espacios deberían permitir el libre desplazamiento del acompañante sin obstáculos en el trayecto, se especificaba también en el proyecto.

Los vehículos debían contar con una rampa retráctil de no menos de 0,70 metros de ancho y no más del diez por ciento (10%) de inclinación, en la parte posterior o lateral del vehículo; una plataforma movible por medios mecánicos o hidráulicos de una superficie no menor a 0,70 x 1,10 metros, capaz de elevar desde suelo hasta el  vehículo, a una silla de ruedas de construcción normal ocupada por un discapacitado de un peso de 150 Kgs; poseer elementos de fijación de las ruedas de la silla al piso del vehículo, así como barandas internas de protección lateral (pasamanos, cinturones de seguridad, etc.).

Este proyecto fue presentado por mí como parte integrante del bloque de concejales Junín Para la Victoria y en ese momento, fundamentaba la iniciativa indicando que los autos, taxis o remises no están adecuados para traslados de personas con características de movilidad reducida o con discapacidad, se conoce que las empresas que ofrecen estos servicios y contratadas por las obras sociales hacen esfuerzos para cubrir con el traslado, y las comodidades para las personas con estas características distan de ser las mejores poniéndose en riesgo muchas veces la continuidad  del servicio, seguridad, confort e higiene.

Como hace seis años hoy esas condiciones siguen iguales y se agudizó por el hecho de que casi en un 99% los vehículos de taxis o remises cuentan con tanques de gas natural comprimido (GNC) que hace imposible que las sillas o elementos ortopédicos sean colocados en el baúl.

Hoy vemos que el Ejecutivo ha presentado un proyecto de ordenanza para poner en marcha la implementación de vehículos adecuados para ese transporte de personas con discapacidad. Lo celebramos y acompañamos. Somos parte de un espacio que está siempre abierto al diálogo y con actitudes propositivas, por eso observo con agrado esta determinación del Departamento Ejecutivo municipal que seguramente será acompañada por la totalidad de los ediles.

He sido y seguiré siendo muy crítico con relación al manejo que está haciendo el gobierno municipal en esta pandemia y mantengo esos cuestionamientos, entre otros temas y visiones de una ciudad, pero creo que esta es una iniciativa importante que aportará un alivio y también constituirá una mejora en la calidad de vida de muchas familias juninenses y personas con discapacidad.

(*) Exconcejal, dirigente del Socialismo en Junín Bicentenario, en el Frente de Todos.