México, que llegó al Mundial en medio de una enorme polémica por la fiesta que todos los jugadores celebraron con 30 "escorts", dejó una muesca importante en la historia. En la apertura del Grupo F, le ganó al campeón 1 a 0 con un gran primer tiempo y un golazo de Lozano. Alemania es la cuarta defensora del título que cae en el partido debut. Ya les sucedió a Argentina en España 82 e Italia 90, a Francia en Corea/Japón 2002 y a España en Brasil 2014.

Las dos veces que México llegó a cuartos en un Mundial, fue jugando como local, en 1970 y 1986, y nunca derrotó a un rival de la envergadura de Alemania en una Copa del Mundo. Los alemanes buscaron cambiar la historia en el segundo tiempo, pero ahí México fue fuerte en aquello en lo que históricamente falló: supo sostener el resultado. Por algo el final de partido encontró a Javier "Chicharito" Hernández llorando de alegría sobre el césped durante largos y convulsos minutos.

La gran jerarquía y los apellidos no pudieron contra el gran planteo del Tri, que pudo sacarse un gran peso de encima, debutando a lo grande.