jueves 28 de marzo de 2024

CULTURA | 20 oct 2018

EMPEZÓ GANANDO EN “ODOL PREGUNTA”, CON 16 AÑO

Oscar del Priore: “Tengo mis dudas sobre el futuro del tango”

“Hoy no hay mucho tango nuevo. Existen diversas pequeñas agrupaciones. Pero no tienen convocatoria. Si me dan gratis el Luna Park para que haga un festival de tango, no lo hago".


Por: ISMAEL CANAPARO

Hace ya casi sesenta años que Oscar del Priore vive del tango. Todo comenzó en 1960, cuando ganó 200 mil pesos en el mítico “Odol Pregunta”, al contestar por qué los músicos de las “típicas” vestían de gaucho.

Recién había cumplido los 16 y ni soñaba que luego conduciría un programa de radio (“A través del tango”). Entre Municipal y La 2x4, lleva 45 años en el aire, una de las más larga permanencia en la historia de la radiotelefonía argentina.

Hoy, con 74 años, sigue al frente de su programa por la FM 92.7 Radio de la Ciudad, "La 2x4", de martes a jueves, en el horario de 1 a 2 de la mañana. Demuestra, como solía decir aquel gran comentarista fallecido hace tiempo, Roberto Casinelli: “Hay que trabajar para el tango y no que el tango trabaje para nosotros”.

El periodista, ensayista y poeta Eduardo Mazo entrevistó en febrero de 2004 a Oscar del Priore, uno de los más profundos conocedores del tango y su mundo. Estas son algunas de sus opiniones sobre la realidad del tango, que no se modificó en los últimos catorce años pese al lapidario paso del tiempo y que sirven para entender lo que sucede con el género.

“Se perciben ciertas contradicciones entre los entendidos sobre los comienzos del tango. Unos se refieren a un origen de negritud, de los primeros africanos llegados al Río de la Plata, otros sugieren una base europea, una música que vino con inmigración blanca. Creo que no podré decir demasiado. Además es un tema que, si bien es interesante, a mí nunca me desveló, porque ese tango, sus orígenes, que yo llamaría el pre-tango, tiene que ver con el tango que nos gusta a nosotros. Yo nunca voy escuchar un tango de como “Detrás de una liebre iba”, “Andate a la Recolecta”, “Toma mate”. No es que los deseche, pero a mí, el tango que me gusta, es otro, entonces. Seguramente el tango es creación de los inmigrantes europeos, o mejor dicho, de sus hijos, de la gente joven. Me refiero al tango bailado, tocado. Pero los orígenes musicales, yo creo que vienen bastantes claros de la habanera cubana.

“El tango fue en sus comienzos una música de las clases bajas, llamadas populares, incluso, de los sectores marginales de la sociedad. En cuanto a la creación, al principio es una música de la gente de poco dinero, de la gente de los suburbios, de los barrios. Después, enseguida va a ganar todo Buenos Aires”.

“En el interior de nuestro país los sentimientos hacia el tango son menos expresivos. Yo creo que ni la zamba ni el tango generan unanimidad. En la actualidad, los únicos que tocan en todo el interior son los cuartetos. Se está suplantando el tango por la ‘cumbia villera’,  cuyos mensajes parece que llegan más a la juventud. Puede ser que llegue más a la juventud, sí. Pero yo hago una separación, no compararía. No puedo comparar, porque el tango es una música, una danza, una poesía, y la “cumbia villera”, para mí, es algo horrible, estéticamente. Los tipos que hacen la cumbia villera tocan mal, las letras son espantosas. Ni punto de comparación con el tango. Yo no compararía. Ahora, que hay gente que le gusta la cumbia villera, que le guste, me parece perfecto. Tenemos libertad para que a cada uno le guste lo que le guste. No lo enfrentaría con el tango, son dos cosas tan distintas, porque el tango desde su origen tuvo calidad. El tango está hecho por gente que estudia música, si bien lo primeros tangueros eran intuitivos. Los poetas del tango son, no digo todos, pero Manzi, Discépolo, Celedonio, Cadícamo, son reales poetas. Lo de la cumbia villera es un horror. No estoy haciendo comparaciones, por supuesto, pero esto me lleva a reflexionar que existen amplios sectores juveniles en la misma ciudad y no sólo en sus zonas marginales, que se han apropiado de esa música dejando el tango a un lado. Y ya estamos conviviendo con la tercera generación de aquellos inmigrantes que llegaron del interior del país. Una generación que, siendo ya absolutamente porteña, se inclina hacia otra música muy distante del tango”.

“A muchos jóvenes les encanta bailar el tango. Pero no a todos. Es un grupo. La gente actual, los jóvenes de hoy, los que bailan el tango, bailan un fenómeno histórico. El tango no se desarrolla actualmente. ¿Qué tango se toca, qué tango se baila? Los tangos de antes. Y en las milongas, uno va a cualquier milonga y todas las grabaciones que pasan tienen más de medio siglo, y todos los que tocan están muertos. Hay tango para escuchar, que es Piazzolla. Pero Piazzolla, ¿cuánto hace que terminó? Creo que existen nuevos grupos de tangos, hay conjuntos de tangos dentro de la línea de calidad. Pero son pocos, no tienen trascendencia, no tienen convocatoria. Hay muy buenos: ”El Arranque”, me encanta; ”Vale Cuatro”, me encanta, pero no reúnen trascendencia. Fijate que en lo bailes se sigue bailando a Pichuco, Basso, Pugliese, Tanturi, De Angelis,  Di Sarli, D’ Arienzo, todos de los años cuarenta o de más atrás. La cumbia villera es un fenómeno masivo, el tango no. Ahí hay una gran diferencia”.

“Yo creo que el tango no es un fenómeno masivo. ¿Cuántos discos se venden de tango? Muy pocos. Se venden siempre los mismos, lo de Troilo… ¿Cuánta gente va a ver un espectáculo de tango? Yo veo que todas las noches, en los salones que tocan los artistas de la cumbia villera se llenan, bailan. El tango no. De pronto, además, los bailes de tango se hacen con discos, con discos de muertos de hace muchos años. ¿Cuánto hace que no hay un éxito en tango?. ”Balada para un loco”” fue el último éxito en el año 69 creo que fue, por ahí. Pero no hay tangos que la gente los cante por la calle, por ejemplo, que se acuerde. Sí hay algunos, pero los antiguos: “Malena”, “Tinta Roja”, que sé yo.

“Y si no hay renovación bailable, o de compás, este tango suspendido en el tiempo, está en peligro.  Yo tengo mis dudas sobre el futuro del tango. Veo que llegó hasta Piazzolla y después no hubo más nada trascendente. Hay cosas buenas, está Garello que es un fenómeno. Pero no son fenómenos que arrastren gente. Antes cantaba Alberto Castillo y se cortaba la calle, porque era ahí donde estaba cantando, o Rivero, todos esos tipos. ¿Y ahora?…”

“Se está convirtiendo el tango en una música underground, como se dice ahora, para referirse a un hecho subterráneo, un poco escondido. Fíjese la música clásica, ¿qué paso con la música clásica? En ciertos sectores les gusta mucho y la siguen escuchando, pero no se desarrolla más. Uno va al Colón y tocan las mismas óperas, los mismos conciertos y va el grupo que le gusta esta música. Siempre el mismo”.

“Hay cierto escepticismo en mis opiniones, un análisis muy particular, porque, por otra parte, hay quien dice que sí, que el tango tiene futuro. Ojalá. Yo quisiera que sí, pero hace tanto que no pasa nada que me hace pensar que por ahora no se le ve desarrollo Y eso que yo siempre estuve a favor de la vanguardia y siempre me gustaron los movimientos nuevos. Pero ahora lo veo como detenido, orquestas que imitan a las orquestas de antes, que no está mal, pero no le veo desarrollo. A mí me encanta que los jóvenes toquen tango, que lo hagan bien, que lo hagan mal, que lo toquen, que se acerquen al tango, me encanta, pero no encuentro figuras que continúen el desarrollo, como antes, cuando surgía un Pugliese, un Troilo, músicos que iban permitiendo un desarrollo estilístico. Es decir, cada uno con su estilo, con su forma, con los tangos que escribían y que eran éxitos”.

“Aquellos eran éxitos masivos. Sí, masivos. Éxitos en la radio, en el cine, en el teatro, en los discos. Y que era muy buen negocio. Hay gente que dice que el turismo puede ayudar a que el tango sea también un buen negocio porque los que vienen de afuera les gusta  escuchar tango. Ese es otro fenómeno. El turista no entiende nada. El tango que se toca para los turistas siempre es el mismo.…A los turistas le venden cualquier cosa. Les venden buzones. Entre los tipos que van afuera hay unos que son buenos y otros que no lo son. Al turista lo confunden bastante, y le venden espejitos de colores. Eso es otra cosa. Los grupos de tango se mantienen en gran parte con sus viajes al exterior. Pero, ¿les gusta el tango? ¿Qué pasa? Yo no sé. Como nos gustaba a nosotros que éramos tangueros verdaderos, que nos emocionábamos con Pichuco cuando tocaba un solo de bandoneón”.

“Al tango lo contrabandean. Uno va a cualquier sala que tocan tango para turistas y ponen siempre los mismos tangos, bailan de la misma forma, después hasta le mezclan el tango vestidos de gauchos con boleadoras. Después le cantan esa canción, que no sé porque le hacen creer que es un tango, esa canción de Evita, ”No llores por mí Argentina”, que no tiene nada que ver con el tango, y salen ahí y la cantan siempre en los espectáculos de tango. Se la cantan siempre.  Quieren hacer creer que Evita es representativa del tango. No sé por qué no se les ocurrió hacer un tango del Che Guevara, porque también estuvo de moda. Esto no es la difusión del tango, es la difusión alterada del tango”.

“Me preguntaron dónde está la crisis del tango, si existen decenas de salas de milongas en la Capital y en el Gran Buenos Aires. Pero si usted se pone a controlar, va a ver que no están abiertas todos los días. Un día está una, otro día está otra. Son salones no muy grandes, la gente que va, más o menos es la misma. Habría que hacer un análisis de cuál es el público cautivo que va de un lado a otro, y la música que se toca es en todos lados la misma. Y además, no es un negocio brillante, porque las entradas son muy baratas y los que van a bailar prácticamente no consumen. Piden una botella de agua”.

Recorrida por su carnet biográfico

Datos sintéticos de Oscar del Priore. Nacido en Buenos Aires el 11 de febrero de 1944. Locutor profesional recibido en el ISER. Vicepresidente 1º de la Academia Nacional del Tango. Académico de número de la Academia Porteña del Lunfardo. Musicógrafo de la Orquesta del Tango de la Ciudad de Buenos Aires. Profesor del Liceo Nacional del Tango, del Centro Educativo del Tango, del IUNA (Instituto Universitario Nacional de las Artes) y del Centro Cultural Konex. Fundador y Rector de la Universidad del Tango de Buenos Aires. Conductor de programas radiales en diversas emisoras. Su programa “A través del Tango” ha superad las cinco mil emisiones.

Presentador en escenarios de diversos locales, entre ellos “El Viejo Almacén” (por dieciocho años) y “Caño 14”. Miembro del CAMU (Consejo Argentino de la Música), dependiente de la UNESCO. Poseedor de la Orden del Porteño de la Asociación Gardeliana Argentina, y de la Orden del Buzón, del Museo Manoblanca.

Considerado el mejor comentarista de tango del siglo XX por APORTA (Ateneo Porteño del Tango) y la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. Dueño de una de las mayores colecciones de grabaciones de tango del mundo.

Autor de “Breve historia del tango” (1967), “El tango de Villoldo a Piazzola””(1975 y 1999) (editoriales Crisis y Manantial), “Cien tangos fundamentales” (1999, editorial Aguilar, con Irene Amuchástegui), “Inventario del Tango” (1999, editorial Fondo Nacional de las Artes, con Horacio Ferrer), “Yo Gardel” (1999, editorial Aguilar) y “Toda mi vida” (Aníbal Troilo) (2003, editorial J.V.E.), además de incontables ensayos y artículos publicados como información en discos y revistas como “Buenos Aires tango y lo demás”, “Clave”, “Talia”, “Tango XXI”, “Viva el Tango”, “El Tangauta”,  “El Chamuyo”, “Diario El Mundo”, etc.

Autor de tangos, como “A través del tango” (con Armando Pontier), “Aquella calesita” (con Enrique Cantore), “Como si fuera un cristal” y ”Luz de una ilusión” (con Víctor D´Amario), “Como un tango”(con Ubaldo de Lio y Celso Amato), “Cerca de tu rebelión” (con José Colángelo), el vals “Evocando a la Flaca” (con Pastor Cores y Héctor Negro), la milonga “Canción sin fronteras” (con Leopoldo Federico), etc.

 

 

OPINÁ, DEJÁ TU COMENTARIO:
Más Noticias

NEWSLETTER

Suscríbase a nuestro boletín de noticias