Por: Semanario

La semana pasada en un solo accidente ocurrido en cercanía de la vecina localidad de O’Higgins murieron tres personas y dos están en grave estado.

Según los datos relevados por el Observatorio de Estadísticas de Seguridad Vial de la Subsecretaría de Gestión Gubernamental bonaerense, en 2017 murieron 1.302 personas en 1.161 accidentes.

Precisamente el año pasado en Junín se contabilizaron 22 víctimas fatales. ¿Cuántas víctimas generamos en las rutas? Los números son sorprendentes, descomunales y causan escalofríos.

Pero también la preocupación para que la obra tan necesaria, ansiada, anhelada y plena de calificativos se termine.

Dudas surgen y son muchas. No alcanzará con la amenaza lanzada por el secretario General de UOCRA Junín, Eduardo Diotti, acerca de que “si se para la obra de la autopista, nos vamos a vivir a la municipalidad”. Hay veces en que pareciera que el gremialista tendría que ir empezando a desempolvar su bolsa de dormir para mudarse al palacio comunal.

Desde el gobierno “buena onda”, el intendente Pablo Petrecca y sus legisladores PRO, Laura Ricchini y Juan Fiorini, publicitan en las redes sociales cada vez que hay un adelanto. Que el puente, que la tierra, que la brea, la cal, el asfalto. Pero…

Como dijo el gobernador santafesino (no oficialista) Miguel Lifschitz esta semana sobre una de las obras para su provincia "hasta que no veamos la autopista no vamos a creer del todo lo que se dice. Hubo tantas promesas del gobierno anterior y de este Gobierno que nunca se concretaron…"

OBRAS FRENADAS

Si bien todos esperamos que las obras de la autopista de la Ruta 7 se completen, de nada serviría apelar al pensamiento mágico de que por desearlo ocurriría.

Debemos tener en cuenta que hay obras que se han paralizado por atraso en los pagos desde el Estado o desfasajes que tienen las empresas en función de los contratos realizados y la alta inflación.

Según pudo saberse, las obras complementarias de la autopista sobre la ruta nacional 5, a la altura de la ciudad bonaerense de Luján, fueron abandonadas en las últimas semanas, sin que se hayan terminado la construcción de las colectoras, puentes y bajadas correspondientes, además de la finalización de los trabajos hídricos y algunas planificaciones que terminaron por complicar la vida cotidiana de quienes viven en la zona, según denunciara el periódico “El Civismo” de dicha ciudad.

En el sur bonaerense las obras de la continuación de la autopista Buenos Aires-La Plata hacia el puerto quedaron paralizadas. Las máquinas de las empresas Esuco y Helport se retiraron, quedaron los movimientos de suelo y un tramo del camino que une Ensenada con la capital provincial sin iluminación. El gobierno culpa a la empresa por las demoras, y la empresa culpa al gobierno por falta de pago.

Hace poco más de una semana que la municipalidad de Arrecifes anunció que la construcción de la autopista que une Pilar y Pergamino se encontrará retrasada por falta de pagos. Los motivos son similares al que están atravesando varios empresarios de la construcción del país: no pueden absorber los costos de la devaluación del dólar que generó un resultado negativo en los precios de los materiales de las obras.

¿PATRIADA EN JUNÍN?

Algunas fuentes aseguran que la empresa encargada de llevar adelante el tramo Carmen de Areco – Junín y variante Chacabuco, decidió continuar adelante a pesar de los atrasos constatados en los pagos. La UTE conformada por HOMAQ S.A., Constructora Dos Arroyos S.A. y UCSA S.A. se adjudicó las dos obras. La oferta original de la empresa fue (en pesos) de $ 1.315.056.445,20 y la mejora fue de $ 1.282.837.562,29, ofreciendo así un descuento del 2,45% por la adjudicación individual.

El plan de obra contemplaba un plazo de 24 meses que sufrió diversos atrasos por cuestiones climáticas y presupuestarias.

El proyecto

El proyecto para el tramo Carmen de Areco – Junín tiene prevista la construcción de una traza nueva con ocho distribuidores, la construcción de puente sobre el arroyo Lamela y el arroyo Ranchos, la demarcación horizontal, la señalización vertical y la iluminación de los intercambiadores mencionados.

Por otro lado, la licitación de la construcción del tramo variante Chacabuco, que va desde el kilómetro 196 al kilómetro 219. Este tramo evitaría pasar por Chacabuco, como sucede actualmente, haciendo un desvío con una nueva traza de 23 kilómetros que iría desde la curva de Coliqueo hasta el Golf Club Chacabuco. El recorrido actual permanecerá como una avenida de circunvalación para el casco urbano.

Se prevé una estación de peaje a la altura de la localidad.