A casi una semana del terrible ataque sufrido por Selva Piegari, aún no hay detenidos por el hecho. Tras la conmoción causada hace casi una semana, cuando la joven fue hallada por su propia familia en grave estado, no se difundieron avances en la investigación oficial.

La joven fue internada la noche del miércoles pasado y sometida a una intervención quirúrgica, tras haber sufrido una golpiza y haber sido encontrada en un descampado, inconsciente y con gravísimas heridas.

Todavía permanece internada en el HIGA, y hay un estricto silencio sobre la pesquisa llevada adelante por el fiscal Colimedaglia. Apenas trascendió que habían sido llamados a declarar un conocido peluquero y un dirigente relacionado con el servicio de catering, aunque los dos prestaron testimonio sin estar involucrados en el hecho.

Tal era el desconcierto que desde la propia familia salieron en búsqueda de pistas, a través de publicaciones en las redes sociales compartidas cientos de veces.

“La verdad no quisiera estar poniendo esto sentada en una silla de hospital mirando una puerta de terapia para ver si me llaman y poder acariciar a mi niña hermosa. Tan hermosa que hoy casi no la reconozco de los golpes que no se sabe quién le dio en su cara y le partió la cabeza con algún elemento contundente. Eran las 3 de la tarde salió a caminar llena de vida y la dejaron tirada 5 horas bajo una lluvia copiosa que se desató de repente. Ese hijo de puta está suelto, está entre nosotros alguien lo conoce lo vio llegar lleno de sangre y lo protege”, escribió la mamá la semana pasada.

Pero los días transcurrieron y el caso ingresó en una zona de hermetismo absoluto. ¿Declaró la mujer golpeada? ¿Ya pudo prestar declaración sobre lo acontecido? ¿No sabe quién la golpeó o teme decirlo? ¿Por qué las autoridades no brindaron más precisiones sobre la continuidad de la investigación?

El tema de que Selva milita en un espacio político opositor hace que se redoblen las precauciones a la hora de la comunicación: desde el oficialismo local no quieren que se mezclen los temas, sino que se trate a la agresión como un hecho completamente ajeno a la participación política de la joven. De hecho, desde su espacio no han salido voces reclamando una dilucidación pronta sobre lo acontecido. ¿Un pacto de silencio?

Lo único concreto es que pasó una semana: golpearon a una mujer y la abandonaron en un terreno tal vez creyéndola muerta, y todavía no hay detenidos.