viernes 29 de marzo de 2024

LOCALES | 3 jun 2019

Un año sin Casahuerta

SUTEBA sigue reclamando por el cierre de una escuela que dejó a chicos fuera del sistema

“Las aulas de aceleración propuestas como alternativa fueron un fracaso, y todavía esperamos respuestas de las autoridades educativas para que den cuenta sobre dónde están esos jóvenes y donde está el Estado”, reclamó la secretaria general Francina Sierra.


A través de una carta pública y un video con testimonios directos de ex alumnos y padres de esos chicos que quedaron fuera del sistema escolar, el gremio docente SUTEBA Junín sigue recordando y recriminando el cierre de Casahuerta, una extensión educativa que dejó de funcionar hace un año.

En este marco, se invitó a toda la comunidad de Junín “a repensar y dimensionar la gravedad de un hecho concreto: el cierre de una escuela en nuestra ciudad”.

Además, con la firma de la secretaria general del gremio a nivel local, Francina Sierra, y bajo el título “El Intendente de la frazada corta”, se dio a conocer la siguiente carta exponiendo la situación:

“El intendente Petrecca cerró la extensión de la ex Escuela Media Nº 8, conocida como Casahuerta, en el mes de junio de 2018, tras numerosos intentos de desmentir dicho cierre a través de argumentos relacionados con la reforma de la normativa, la reformulación del proyecto, la optimización de recursos, y paradójicamente, hasta la “inclusión”.

A principios de este año las autoridades educativas anuncian que el espacio físico que ocupaba Casahuerta será destinado a una base de campamento como espacio de “inclusión” para alumnos de nivel inicial y especial. Como si en Junín, no hubiera otros espacios físicos para tal objetivo.

Con la excusa de incluir a unos se justifica la exclusión de otros, y de esta manera se consolida la política de ajuste de #Vidal y #Petrecca, pero además, se clarifica el desprecio real que tienen hacia la Educación Pública y los sectores más vulnerables.

La decisión política de Vidal, de cerrar los Bachilleratos de Adultos, fue el puntapié inicial de una seguidilla de consecuencias ligadas a la no inserción escolar de casi 50 jóvenes juninenses que quedaron mucho más afuera del sistema de lo que estaban.

Las aulas de aceleración propuestas como alternativa fueron un fracaso, y todavía esperamos respuestas de las autoridades educativas para que den cuenta sobre dónde están esos jóvenes y donde está el Estado.

Casahuerta era un Bachillerato de Adultos, pero fundamentalmente, era la verdadera respuesta a la inclusión que necesitaban esos jóvenes desde lo pedagógico y desde lo afectivo. La posibilidad real de reinsertarse en la sociedad, tener futuro y poder soñar. Pero además, el espacio en el que podían cubrir necesidades básicas como la alimentación de cada día y la socialización.

Intendente, ¿este es el compromiso con la Educación Pública que tanto le enorgullece a Ud, a Vidal y a sus funcionarios??

No le mienta más a los vecinos de Junín”.

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