Por: Semanario

“Quiero agradecer a la población por colaborar de manera permanente con nosotros. Desde el Municipio se hizo un aporte muy grande y fundamental para poder tener esta unidad”.

Las frases -de ocasión- fueron expresadas por el titular de la Cooperadora de Bomberos Junín, Juan Carlos Amengual, en una conferencia de prensa que sirvió de presentación de la escalera de rescate mecánica.

“La galería de dinosaurios es variada y nunca deja de sorprendernos”, dijo hace unos años un cuadro político de la izquierda platense, cuando se hicieron públicos los antecedentes del ex comisario Edgardo Mastandrea (murió en prisión el 27 de julio 2016), quien por entonces se desempeñaba “como asesor en seguridad” de la Coalición Cívica de Elisa Carrió, y que fuera condenado a 15 años de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 1 de La Plata, por delitos de lesa humanidad cometidos en Junín durante los años de la dictadura cívico-militar.

Esa frase cobró vida pocos días atrás cuando Juan Carlos Amengual, ex titular de la Comisaría Primera, indagado por el Juez Federal Héctor Pedro Plou y mencionado por los presos políticos en los juicios de lesa humanidad como integrante activo del circuito represivo local, se sentó en la misma mesa que el intendente Pablo Petrecca y otros funcionarios municipales, durante el anuncio de la adquisición de una escalera de rescate mecánica para el cuerpo de bomberos.

Amengual es el presidente de la Asociación Civil Cooperadora de Bomberos de Junín desde hace varios años, aunque en una oportunidad fue relevado del cargo que ostentaba gracias a la presión y lucha de las organizaciones de derechos humanos, y ante la apatía de la conservadora sociedad juninense, que hoy nuevamente lo “apaña”. Y que hace lo propio con Héctor De Giulio.

(Héctor De Giulio, que de Cabo ascendió a Suboficial Mayor durante su carrera haciendo inteligencia en la sociedad juninense durante la última dictadura militar, fue denunciado ante el Poder Judicial de le Nación como uno de los represores que visitaba el Centro Clandestino de Torturas que funcionó en la UP 13, cuando la cárcel estaba en construcción y allí llevaban a los secuestrados y le infligían terribles torturas).

En la década del ‘90, el ex comisario Amengual probó con reciclarse participando en un proceso electoral de la mano del PJ (fue candidato a intendente en la interna del año 1997, impulsado por José Joaquín Pereyra-UOCRA), aunque no tuvo la misma suerte que su colega Luis Abelardo Patti, quien en 1993 inauguró su carrera política siendo electo jefe comunal de Escobar, también dentro de la estructura del peronismo.

Autor del libro “Consejo de Prevención Ciudadano”, Juan Carlos Amengual fue propuesto -en 2008- al entonces intendente municipal Mario Meoni como asesor en seguridad, sugerencia que el hoy candidato rechazó de plano, acompañado por las Madres de Plaza de Mayo y la dirección de Derechos Humanos municipal, a cargo de Oscar Farías.

INVOLUCRADO

En el juicio por delitos de lesa humanidad cometidos en Junín, desarrollado a fines de 2014, hubo que esperar hasta la última jornada de testimonios para escuchar la palabra de un ex policía que narró cómo se vivió la dictadura en el interior de las fuerzas de seguridad locales.

En 1977, Ángel Luis César era un policía joven que empezaba sus prácticas sumariales en la Comisaría Primera. Según contó frente al Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 1 de La Plata, presenció las atrocidades que se cometieron dentro de la dependencia policial de Gandini y Quintana.

“El proceder de esta gente lo vi en forma directa, fui testigo de eso, a estos tipos no les importaba nada, ni la dignidad ni la vida”, aseguró en la séptima jornada del juicio que se realizó en el Salón de la Democracia Argentina de la UNNOBA.

César aseguró conocer a todos los imputados -y condenados: “Eran la patota del servicio de calle, los pistoleros de la policía, los que mataban y desaparecían gente”. Según dijo, con el tiempo se dio cuenta de que “estaba en un mundo de locos, con gente sin principios, sin valores, dispuestos a cualquier cosa”.

El testimonio de César también involucró a otras personas. Según dijo, el ex comisario “Juan Carlos Amengual era otro pistolero que se encargaba del traslado de los detenidos: era la persona que tabicaba, esposaba, encapuchaba y los trasladaba tanto a Mercedes como a San Nicolás”. El ex policía recordó que Amengual “hoy tiene una agencia de seguridad y maneja tipos armados”, y remarcó que no sabe “cómo no le quitan su licencia”. César también afirmó que la casa del ex detenido Armando Álvarez “era continuamente vigilada por Camarro, un tal Bevilacqua, por Héctor De Giulio y Maisterra”.

CAUSA JUNÍN II

La segunda parte de la Causa Junín se encuentra en la Cámara Federal, ya que los jueces federales Pedro Plou (Junín) y Daniel Rafecas (Comodoro Py) se declararon incompetentes. De esta manera, será en esa instancia donde se decida el destino de la investigación que, según fuentes consultadas, podría quedar en manos de una fiscal federal de la zona.

“Estas dilaciones, en las que los jueces se van declarando incompetentes, nos alarman como agrupación de derechos humanos, ya que creemos que lo están haciendo para frenarlas. Sabemos cuáles son los tiempos judiciales, pero tenemos miedo que pase lo mismo que con la causa principal que tardó muchos años. Los represores y las victimas están cada vez más ancianos”, señalaron desde el Frente por la Memoria Colectiva.

“Los nombres de José Luis Camarro, Luciano Guazzaroni, Héctor Di Giulio y Juan Carlos Amengual fueron surgiendo durante el proceso y son esas las personas señaladas por el juez para ser investigadas”, ampliaron.