En una carta dirigida al intendente Pablo Petrecca y al secretario de Seguridad Andrés Rosa, los trabajadores locales que brindan el servicio de control en lo que hace a “admisión y permanencia”  promovieron una modalidad que podría servirle tanto a la comuna como a los trabajadores.

En la nota destacan que " nuestro trabajo no está ajeno al resto de otras actividades, con una diferencia radical: que nuestro sector va a ser uno de los más postergados para volver a funcionar (boliches bailables, recitales musicales, shows artísticos, etc.), por lo cual esto va a ocasionar una pérdida muy importante de puestos de trabajo e ingresos económicos para muchas familias de Junín".

Por lo que plantearon “beneficiar a la ciudadanía a través de controladores/as de Admisión y Permanencia para ayudar en aquellos lugares (bancos, hospitales, unidades sanitarias, supermercados, pronto pago, etc.) donde hay aglomeración de personas".

Mónica Maraviglia, trabajadora del sector, firma la misiva donde puntualiza que “varias familias estarán sin trabajo hasta el año que viene. He llamado al sindicato para que colabore con este reclamo y podamos encontrar una salida".

De hecho, en otros distritos parecen haber aportado mayor sensibilidad hacia el sector, como el caso de Lincoln, donde el intendente ya puso a trabajar con un “contrato temporario” a varios controladores, en horarios rotativos y de esta manera se garantiza un ingreso mínimo a las familias.

“Ayudamos a la municipalidad, descomprimimos también a la policía y pueden realizar su tarea específica de seguridad. Nosotros colaboraríamos en bancos, supermercados, prontos pago y locales de concurrencia de público pero se deben respetar las normas de distanciamiento", destacaron los trabajadores.

"Si se exceptúan más actividades, se van a necesitar más controles", señaló la representante, quien aseguró que están esperando una rápida respuesta por parte de los funcionarios locales.