Apenas dos días después de la Nochebuena, cuando los boliches al aire libre no se habilitaron y los jóvenes se aglomeraron en el Camino Costero, el gobierno de Pablo Petrecca dará otro golpe de timón para Año Nuevo: permitirá la apertura de los locales nocturnos a cielo abierto y cerrará el ingreso a la Laguna de Gómez. Esto último no fue anunciado oficialmente, pero es un hecho vox pópuli.

Los boliches ya habían abierto sus puertas en modo experimental el sábado 19: era como bares, con mesas y sillas en vez de pistas de baile, y regidos por el protocolo vigente para el sector gastronómico. Pero, como quedó demostrado, se vendieron entradas sin “mesas” y la música estridente invitó al baile, que se realizó sin distanciamiento ni ningún tipo de medida de prevención ante el Covid.

Por este desborde, y a la par de la decisión del gobierno provincial de no permitir eventos sociales de hasta 200 personas, para Nochebuena el municipio decidió no habilitarlos.

Por eso, los chicos se concentraron el Camino Costero: alrededor de 5000 jóvenes y adolescentes coparon el lugar, sin ningún tipo de control. La lluvia de críticas hizo que el intendente Petrecca, junto a la apertura de boliches, tomara otra decisión drástica: cerrar la Laguna de Gómez para Año Nuevo.

Sin dudas, esas idas y vueltas en las decisiones no hace más que exponer la falta de sentido común de las autoridades municipales, que van “midiendo” la opinión generalizada y actúan en consecuencia, en función del marketing adecuado.

Los bolicheros fueron los más fastidiados por no poder trabajar en Nochebuena y lo hicieron saber, molestos por la acumulación de tantos jóvenes en un sector público de la Laguna, donde compartieron la noche sin pagar entrada ni costosas bebidas. Así que ahora, el Intendente busca congraciarse con ese sector.

“Hace seis meses venimos tratando el tema de la Laguna con la Municipalidad y los funcionarios nos dijeron en todo momento que no iban a permitir lo que pasó. Y sucedió todo lo contrario porque los controles que tendrían que haber estado no estuvieron”, afirmó un bolichero.

“Ahora estamos esperando que nos den nuestro cartón de habilitación y nos digan qué es lo que vamos a poder hacer. Estamos esperando decisiones coherentes y no de escritorio como se viene haciendo”, manifestó.

MARCHAS Y CONTRAMARCHAS

Es notoria la falta de orientación que sufren los funcionarios municipales, envueltos en marchas y contramarchas, con mensajes confusos y falta de una programación seria que incluya a trabajadores y jóvenes que buscan divertirse tras el confinamiento.

A la hora de explicar por qué se juntaron 5000 pibes en el Camino Costero para Nochebuena, el director de Seguridad municipal, Luis Chami, dijo: “Este evento fue una decisión privada de cada uno y terminó siendo un hecho colectivo. Por decisión provincial, la Laguna está abierta. Si no, se hubieran juntado en Circunvalación o en el Parque Borchex. No hubo conflictos y no hubo un solo accidente”.

Sin embargo, ahora –pese a que la apertura de la Laguna fue decisión provincial según asegura Chami- desde el municipio deciden cerrarla para fin de año. ¿Quién tiene entonces la potestad de abrir o cerrar este espacio?

“Se autoconvocaron y se organizaron en grupos individuales, que se fueron ubicando a lo largo del Camino Costero. Hubo pibes que salieron a un lugar público donde no hay ninguna orden judicial que les impida ir. Como Estado no se puede hacer nada”. ¿Y por qué ahora lo cierran?

Es difícil seguir una línea de acción en lo que hace a la prevención, cumplimiento de protocolos y controles. Lo que vaya a pasar en Año Nuevo… es un desafío imaginarlo por ahora.