

Las plazas de Junín lucen el mismo estado de abandono que la ciudad entera: faltan luminarias, no hay mantenimiento ni limpieza y se ignora el cuidado de las especies forestales.
Mientras se planean grandes obras, con la creación de bicisendas por la avenida San Martín a través de la inversión de más de 30 millones, el municipio no se encarga de la realización de las más elementales tareas de conservación del espacio público, para que sea disfrutado por los vecinos.
Los bancos están rotos, quedan restos de árboles que fueron talados a medias, los caminos internos dan cuenta de falta de mantenimiento y las hermosas plantas y flores que rodeaban el lugar ya hace rato que dejaron de estar presentes…
La falta de desmalezamiento de algunos espacios más alejados de la zona céntrica, la fumigación espaciada y los juegos y bancos en estado deplorable hacen juego con la suciedad general a la que está sometida la ciudad. A pesar de los diversos anuncios de nuevos servicios de cooperativas y de la empresa Ashira, lo cierto es que la mugre sigue acumulándose en cada rincón de Junín, con calles sin limpiar y montículos sin recoger.