

La decisión de Washington fue tomada principalmente por razones sanitarias, pero también por "factores secundarios como la disponibilidad de vuelos comerciales, restricciones a los ingresos de ciudadanos estadounidenses e impedimentos para obtener en tres días los resultados de los test de Covid", dice el comunicado que reprodujo la agencia Télam.
"Tenemos entendido que no hay ningún cambio en la posición de Estados Unidos para apoyar el esfuerzo de Japón de celebrar los Juegos Olímpicos y Paralímpicos", dijo en declaraciones reproducidas por la agencia de noticias AFP. En la misma línea, el Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos dijo que todavía estaba "confiado" en que los atletas estadounidenses puedan participar en los Juegos en Tokio.
Japón abrió sus primeros centros de vacunación masiva en forma acelerada en una campaña previa a los Juegos Olímpicos, que habían sido cancelados el año pasado debido a la pandemia. Sin embargo, solo el 2% de los 125 millones de habitantes fueron completamente vacunados.
Tokio, Osaka y otras ocho regiones están en estado de emergencia y redujeron la actividad comercial hasta finales de mayo. Informes de prensa indican que las medidas podrían extenderse tres semanas más.