Esta semana que pasó, Alexia no estuvo muy cómodo, pese a que tuvo buenas noticias en su reino. Sir Alfer y Sir Kichi, de los reinos superiores, pisaron su terruño para cortar las cintas del camino real, largamente postergado, pese a que tuvo otras inauguraciones de cotillón, en tiempos de retratos y  sonrisas de Amarillo I, Mariú I y el mismo Alexia, pese a que a la obra, le faltaba de todo. En aquella oportunidad, Alexia dijo con el pecho inflado: ‘ahora vamos a poder transitar con las carretas sin ningún peligro’, cuando quedó a la vista que eso no era verdad.

Tal vez por eso, para que nadie recuerde sus dichos, ahora puso su mejor cara de póker para el retrato en un segundo plano y sonrió a medias, quizá con vergüenza por aquella mentira. Es que recién ahora, los carros con distintos caballos van a poder pasar, sin la necesidad de sortear todos los obstáculos que habían quedado, pese a que igual cortaron y abusaron de las cintas y las palmadas.

No fue el único sapo que se tragó Alexia. A los pocos días, tuvo que comerse otro: salió a guapear que al fin podía inaugurar el caño de caca maestro del reino, y que bla, bla, bla. Pero enseguida, desde el Reino Central le mostraron los papeles, donde le enrostraron los millones de acres que pusieron para que todo eso, pudiera al fin ser utilizado por los de las afueras, que Alexia dice defender y ayudar. O sea, tampoco era verdad.

Tal vez por eso, para recuperar algo de su imagen en un tiempo que los de las afueras elegirán por su futuro, es que Alexia empezó a asomar la nariz. Dejó su despacho y decidió embarrarse un poco (tampoco tanto, la comodidad es innegociable) para que alguno crea que se preocupa por su gente. Y salió a dar unas vueltas por algunos barrios, olvidados desde siempre y en los que ahora parece echará un poco de pedregullo, como para que no se entierre la caballada, cada día que caen cuatro gotas. Sí tampoco es que les va a cambiar la vida a muchos. Pero el circo es bienvenido y Alexia lo sabe.

Porque el fondo del circo sigue igual: Alexia nunca se preocupó por generar un cambio verdadero en las condiciones de vida de su pueblo, al contrario, esquilmó todo lo que pudo con sus tributos y nunca le importó diseñar un futuro posible. Para su gente, y para su reino. Mientras tanto, nunca descuidó el suyo que encaminó ni bien llegó al poder. Primero con Amarillo I y luego, con el séquito caído en desgracia-echado-corrido-ido, solo, en soledad como el Quijote contra los molinos de viento.

Su papel de víctima y de olvidado por ‘los enemigos del bien’ le sirvió como argumento mentiroso, algo así como que todo hubiera sido una maravilla si ‘esa lacra’ no hubiera estado arriba del reino, hundiendo los sueños.

Pero ahora, que ‘los enemigos del mal’ empezaron a cortar las cintas de aquello que los reyes amarillos nunca quisieron terminar, no sabe de qué disfrazarse. Parece que ya ni el virus de la corona podrá salvarlo. Fue su escudo protector ante todos los males y criticó todo lo que pudo, todo. Pero, como pasa siempre, una vez que se corre la niebla, empieza a verse el camino.

Y en el reino, quedó claro, que pese a los lamentos, el barrial venía de antes.

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PetrEgo

Tal vez por hacerse el compadrito al reverendo pedo, salieron a marcarle la cancha. A PetrEgo se le acabó el tiempo de brillos amarillos y de fotos fáciles con obras por hacer por lo que ahora, se muestra con sonrisas falsas y discursos esquivos.

Tendrá que disfrazarse una vez más, ahora que en el pago chico se puso en marcha la estación de líquidos cloacales y el mismo Gobernador vendrá a Ciudad Fría a poner en marcha le estación de Súper-Caca. No sólo eso, el Sub Administrador del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA), Néstor Álvarez, recorrió los barrios de Junín y confirmó que se realizarán obras de extensión de la red de cloacas… por más de 90 millones de pesos.

A eso tiene que sumarle que se inauguró (ahora sí) la Autovía 7, se confirmó que pronto comenzará el tramo de autovía que recorre la ciudad, denominado ‘travesía urbana’ y dentro de muy poco, la terminal de ómnibus quedará lista, igual que el cordón cuneta de avenida La Plata, y el bajo nivel de calle Rivadavia, que tendrá sus primeras obras. ¡Chan!

¡Mielda! Exclamaría el Negro Fontanarrosa. Si el ‘Capitán Reposera’ hubiera durado un cachito más, hasta tal vez algo de todo esto hubiera servido para días y días de anuncios y festejos con globitos amarillos. Pero no. La ‘manga de desagradecidos’ los puso en fuga y decidió apostar por el cambio. Y cambiemos fue historia.

Y la historia que se cuenta, que se ve, es que no hay fotos, pero hay obras. Y muestra a PetrEgo en su verdadera dimensión. Sin ideas, ni proyectos ni globos de ensayos para manotear los distraídos.

Los tiempos han cambiado. Ya no hacen falta más explicaciones, señor juez. Para qué, si todo quedó bien a la vista.

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Te contamos todo lo que NO HICIMOS esta semana

*) Usar y abusar de las fotitos de la inauguración de la Autovía 7. No sea cosa que alguno se avive que antes fue fiasco.

*) Levantar el guardrail que sigue tirado al costado de Circunvalación, altura Respuela. Ya ni cumple años le festejamos.

*) Pintar los carteles de las calles. Con los que pusimos, ya está.

*) Maquillarnos, para disimular la vergüenza de inaugurar una alcantarilla.

*) Contar los días que faltan, para buscar otros aires y que alguno se ocupe del tomuer.