

La multisectorial de Jubilados y Pensionados de Junín comenzó con sus marchas alrededor de la plaza principal cuando el gobierno de Cambiemos promovía tarifazos y crecía la inflación (que no disminuyó) y con ello hacía pedazos el salario del trabajador, pero mucho más todavía a los jubilados y pensionados obligados a vivir miserablemente.
Pero no sólo la retribución miserable, sino que también se cortaron los medicamentos que recibían en forma gratuita, se dejaron de brindar turnos de especialistas en el hospital y los pocos que había debían esperarse meses.
Eso hizo que más de una decena de adultos mayores de Junín murieran sin haber recibido atención médica, mientras Luciana Gómez Panizza regenteaba el PAMI sin la más mínima empatía.
Hoy la situación se estabilizó, mejoró a niveles aceptables a pesar de la pandemia, aunque nunca faltan personajes locales que gustan de poner caras de próceres, pero a los que sólo les interesa al fin y al cabo contar billetes.
NUEVOS VIENTOS
Ahora, la Multisectorial Federada de Jubilados y Pensionados de Junín se constituyó formalmente como nuevo Centro de Jubilados y Pensionados y con la personería jurídica le esperan otros proyectos y otras luchas.
Merecido logro para este gran grupo de afiliados que está integrado por Miguel Saita, Delia Capone, Israel Tornello, Andrés Fantino, Teófilo Silva, Víctor Álvarez, Marta Echeverría, Osvaldo Stabile y Julio Castro, entre otros.
En una charla con SEMANARIO, Saita destacó que “a nosotros todo nos cuesta mucho, ya hace más de tres años que estamos con las marchas y todavía no pudimos solucionar el tema de los médicos que cobran un plus a los jubilados y pensionados”.
Difícil de creer que galenos de renombre y no tanto, que estudiaron gratis en la universidad pública bancada en parte por estos jubilados y pensionados, hoy le meten mano al bolsillo para sacarles un “extra” que ni pueden pagar. Misterios de la decrepitud de los valores de algunos juninenses que con doble moral se muestran abrazados a la familia en las redes sociales.
El dirigente de los adultos mayores puntualiza que “el tema de los turnos con especialistas a veces se complica. Pero hay alguna mejora. Al menos cambió la dirección y en el Hospital (Piñeyro) tenemos diálogo con los funcionarios”.
Pero volviendo al cobro de los médicos de cabecera dice que “se va haciendo costumbre. Todos quieren cobrar y hay algunos pocos que no lo hacen y les agradecemos muchísimo y de corazón. A eso les queremos mandar una nota de felicitación y que la gente conozca quienes son”.
La “diferencia” no es la que les cobran a los jubilados, la “diferencia” está en los valores de cada uno.
“Yo no entiendo –dice Saita- hay médicos que se ofrecen, que consiguen remedios. A veces les mandamos gente para hacer un electrocardiograma que lo requieren de urgencia y lo hacen gratis y hay otros que están cobrando las visitas y cada vez más cara”.
Quienes tuvieron educación gratuita y a los que nadie les cobró para enseñarles las artes médicas empezaron cobrando de 100 a 200 pesos.
“Decían que era para los papeles, para la luz. Qué se yo. Pero ahora algunos hasta cobran 800 pesos, sumado al remis o taxi que se toma el jubilado para ir y venir se le van más de 1000 pesos”, puntualiza uno de los fundadores de la multisectorial.
“No podemos solucionar eso Ya no sabemos qué hacer. No queremos ir más a esos médicos que cobran, pero tampoco se puede. El arreglo que hicieron con PAMI es bastante bueno y si le cobran 800 mangos al jubilado lo hacen pelota”, plantea con franqueza Saita.
Confían en que la personería jurídica lograda les permitirá hacer escuchar más fuerte el reclamo. Además, tienen una página en facebook para “hacer un poco más de ruido”.
“La personería jurídica nos sirve tanto en la parte social y como en la de reclamos. Hay gente de la tercera edad que nunca hizo un viaje por eso ahora ya empezamos con un paseo de un día a Tigre. Hay gente a la que vamos a ir a buscar y ayudarle a pagar para que puedan tener acceso y la posibilidad de una salida. Para eso también tenemos una comisión de eventos para que podamos recaudar y ayudar quienes lo necesiten”.
Saita se entusiasma y dice que viene una etapa de mayor apertura debido a la constitución de este nuevo centro de jubilados que fue posible gracias al apoyo del PAMI que conduce Mario Scorsetti y al proyecto de ley presentado por el diputado provincial Facundo Tignanelli y que favorecerá también a clubes y otras instituciones que suelen dejarse en el olvido.
Aunque sea una formalidad, también servirá a los jubilados y pensionados locales para hacer reclamos en la Justicia y también “para que recibamos donaciones, algo que antes no podíamos tener”.
“Ahora estamos tratando de conseguir un lote para construir un lugar para los jubilados. Todavía recuerdo que en la época de la presidencia de Mauricio Macri quedaron tres jubilados viviendo en vehículos porque no tenían para pagar el alquiler”.
Y finalizó Saita: “tenemos infinidad de proyectos, queremos que todos conozcan la montaña y el mar. Ahora por la pandemia cuesta trabajar, pero de a poquito vamos saliendo. Ya le vamos a buscar la vuelta. Ahora tenemos un marco formal que nos permitirá llevar adelante toda la asistencia social que tenemos pensada para nuestros jubilados y pensionados”, concluyó.