Tal como se había “olfateado” antes de las elecciones, cuando la UCR se plantó con una interna en Juntos, casi es una realidad que el radicalismo juninense armará su propio bloque en el Concejo Deliberante con cuatro integrantes.

A Adrián Feldman y Graciela Blaiotta –quienes tienen dos años más de mandato- se les sumarán Juan Pablo Itoiz y Cristina Cavallo (que renueva) en el cuerpo legislativo local, y el presidente del Comité ya anticipó que la idea es fortalecer el espacio con vistas al 2023, lo que implicaría en principio desprenderse del bloque de Juntos.

“El partido se ha puesto en valor, se ha fortalecido, han aparecido nuevos dirigentes y encontramos candidatos de talla nacional como Facundo Manes y Martín Lousteau, entre otros. También en Junín nos hemos reposicionado, con una gran representación”, dijo Juan Pablo Itoiz.

Y sostuvo: “Pretendemos que la UCR lidere el espacio político y eso lo tenemos que hacer no solo desde la palabra, sino desde los hechos".

Con esta decisión de “reposicionarse” en la ciudad del radicalismo, lo que fue celebrado como un gran triunfo por el gobierno de Pablo Petrecca ahora se torna una dificultad hacia los próximos dos años de gobierno. Con el armado de otro bloque, no contará con esa “mayoría automática” en el Concejo que tanto festejaron, sino que significará que cada proyecto deberá consensuarse, al menos con los cuatro radicales que ya no votarían a libro cerrado.

Esta nueva historia en la política local podrá empezar a vivirse desde el 10 de diciembre, cuando asuman los diez nuevos concejales electos el domingo pasado, y que significarán un cambio importante en el escenario político local, sobre todo para los planes del intendente Petrecca.