

Los juninenses no pueden asomar la nariz en lugares públicos, sobre todo aquellos rodeados de pasto: una invasión de mosquitos afecta la ciudad.
Sin embargo, fue el mismo director de Zoonosis y Bromatología del municipio, Julio Ferrero, el encargado de dar una mala noticia: habrá que convivir con estos insectos entre ocho y diez días, para aguardar su desaparición natural.
Según indicó, “no tiene sentido” fumigar, porque los mosquitos desaparecerán naturalmente en este tiempo.
“Estuvimos sin agua prácticamente todo un año y cuando caen dos gotas salen todos”, aseguró Ferrero, y tras las lluvias se reprodujeron y multiplicaron estos mosquitos surgidos de charcos.
Dado que “estos mosquitos no contagian nada”, se recomienda paciencia a la población, que deberá recurrir a las herramientas habituales como repelentes y espirales. Sin que la comuna intervenga, es posible que en unos días más desaparezcan.