

Por: Redacción Semanario
Mientras las leyes de protección siguen presas de tironeos, intereses y esperas inexplicables en el Congreso Nacional, en el marco del Día Mundial de los Humedales, el Ministerio de Ambiente de la Provincia lanzó el Programa Provincial de Humedales, que promueve una política pública integral para el abordaje de los mismos y una perspectiva para pensarlos desde un enfoque saludable, sustentable y productivo.
Estos ecosistemas fundamentales para la vida, hogares de comunidades y biodiversidad, proveen materia prima, regulan los flujos de agua previniendo sequías e inundaciones y combaten el cambio climático, por lo que desde el Ministerio de Ambiente que conduce la ministra Daniela Vilar se propusieron continuar fortaleciendo el manejo sustentable de los territorios donde haya humedales, promoviendo discusiones en torno a la legislación que proteja a estos socio-ecosistemas y co-creando políticas públicas específicas junto a los municipios bonaerenses.
Es vital trabajar en esos espacios. Sin ir más lejos en Junín, buena parte de sus humedales pertenecientes a la cadena de la pampa húmeda terminaron invadidos por complejos inmobiliarios y hasta por la nueva terminal de ómnibus que todavía no pudo inaugurarse y precisamente esa “ubicación” fue uno de los motivos de años de disputa en Tribunales.
Conocimiento, adecuación normativa, áreas protegidas y fortalecimiento a los municipios donde se ubican los humedales, son algunas de las líneas de trabajo sobre las que el Ministerio de Ambiente bonaerense trabaja para fortalecer y preservar estos espacios vitales para la vida.
En su visita a la reserva Rincón de Ajó, ubicada en el humedal Bahía de Samborombón, la ministra expresó que “para tener humedales saludables, habitables y productivos, necesitamos que salga la Ley de presupuestos mínimos”.
Desde el Ministerio se avisó que el Programa Provincial de Humedales se desarrollará a través de 7 líneas estratégicas:
*Conocimiento: consiste en el relevamiento del territorio, estudios científicos, evaluación de áreas afectadas por incendios y manejo de datos geoespaciales para prevenir, seguir y determinar áreas en peligro. De esta manera, se refuerza el trabajo que el Ministerio venía llevando adelante con la elaboración del Inventario provincial de Humedales; fue la primera provincia del país que completó el Nivel 2.
*Adecuación Normativa: el Ministerio participó del debate en el Congreso de la Nación, exponiendo los fundamentos que tiene la Provincia de Buenos Aires para defender una Ley de Presupuestos Mínimos. Además, participó de las subcomisiones del COFEMA, elaborando y analizando informes y proyectos para la creación de la Ley de Humedales (Resolución COFEMA 498/22).
*Áreas Protegidas: el Ministerio viene desarrollando planes de conservación y manejo estratégico de las Áreas Naturales, Reservas, paisajes y espacios verdes provinciales donde haya humedales.
*Fortalecimiento Municipal: se brindará especial centralidad al trabajo articulado entre los gobiernos locales y los equipos técnicos del Ministerio, para garantizar una gestión sustentable de los ecosistemas, con anclaje territorial e incluyendo a las comunidades. Además, el programa propone:
*Trabajar en la planificación del Ordenamiento Ambiental del Territorio.
*Fortalecer las instancias de acceso a la información pública.
*Potenciar la Gobernanza Ambiental, articulando con los gobiernos nacionales, provinciales, municipales y la ciudadanía para la definición de políticas públicas.
Muchos de los humedales bonaerenses se ubican en la zona del AMBA y ya generaron fuertes controversias por su uso y ocupación entre vecinos y desarrolladores inmobiliarios, en algunos casos con intervención judicial.
¿Por qué es importante debatir y normar sobre estas cuestiones? Entre otras cosas, para que la urbanización no ocupe sitios protegidos y que representan una reserva de tierra, aire y vida para las distintas especies y sirvan de protección el funcionamiento de un ecosistema vital.
Uno de ellos, en Hudson, aún normados como área de reserva, reciben el impacto de emprendimientos e inversiones a gran escala, promovidos por grandes desarrolladores inmobiliarios. Los barrios privados de la zona han sido construidos sobre la reserva de selva ribereña más austral del cono sur, poniendo en peligro no solo el funcionamiento del ecosistema sino también a las poblaciones de muchas especies de animales y plantas locales.
Laguna de Rocha (Partido de Esteban Echeverría)
A mediados del año pasado, luego de meses de litigio judicial, la Suprema Corte de Justicia Bonaerense autorizó a la Asociación Civil Racing Club a construir un predio deportivo en la zona de humedales de la Laguna de Rocha, espacio declarado Reserva Natural por la ley provincial N° 14.488 en 2013. Este avance inmobiliario representa una crisis ambiental y habitacional ya que, de rellenarse hectáreas en Laguna de Rocha, las localidades de 9 de Abril, Ingeniero Budge, Villa Celina, Fiorito, entre otras, quedarían expuestas a mayor riesgo de inundaciones.
El Palomar.
Ubicado en el partido de Morón, este humedal todavía no ha sido declarado como reserva oficialmente. Su mayor amenaza es el desarrollo inmobiliario impulsado a partir de la puesta en funcionamiento del Aeropuerto Internacional de El Palomar. La organización local Isla Verde y vecinos de la zona trabajan desde hace más de 7 años con el objetivo de conseguir la declaración de un área protegida urbana en estos humedales, pastizales y bosques asociados, que pertenece a la Fuerza Aérea de El Palomar.
Los humedales son uno de los ecosistemas que sufren mayor deterioro, pérdida y degradación. Se estimó que desde 1970 se ha perdido un 35% de los humedales a nivel mundial, según Ramsar.
Bosques de Ciudad Evita.
La reserva de los bosques de Ciudad Evita es la primera reserva natural de La Matanza y contiene dentro áreas de humedales muy valiosas en la Cuenca Matanza-Riachuelo. El predio y sus ecosistemas se encuentran más cuidados desde que se lo declaró área protegida. Sin embargo, ha sufrido modificaciones debido al desarrollo urbano en la zona, sobre todo en los últimos años.
La tala de árboles, los incendios, la usurpación del predio y las construcciones ilegales en el yacimiento arqueológico Querandí, ponen en serio riesgo la existencia de un área protegida de vital importancia para el municipio a nivel ambiental e histórico.
Santa Catalina.
Hace nueve años y gracias a una campaña impulsada por las y los vecinos de Lomas de Zamora, Santa Catalina fue declarada Reserva Provincial, a través de la Ley 14.294. Ubicada en la ribera sur de la cuenca Matanza-Riachuelo, de sus 650 hectáreas, 300 pertenecen a un humedal. Este ecosistema, según Ana Di Pangracio, directora ejecutiva adjunta de FARN, funciona como una “esponja” para la zona y es vital en la prevención de inundaciones.
A casi una década de su declaración como reserva, todavía falta reglamentar la Ley y desarrollar un plan de manejo de la misma. Mientras tanto, continúan sucediendo actividades de relleno, construcciones y quemas en los márgenes que afectan notablemente a los barrios locales y aledaños.