

Por: Redacción Semanario
Cada 10 de noviembre se recuerda un nuevo aniversario de la inundación que sumergió a Villa Epecuén, el pueblo ubicado en el partido de Adolfo Alsina, provincia de Buenos Aires, que quedó en la ruina. En las décadas del '50 y el '70 el pueblo llegó a la fama por ser una especie de "Mar Muerto argentino" con aguas hipersalinas, elegidas para tratar enfermedades reumáticas y de la piel. Su popularidad fue tan grande que llegó a competir con Mar Del Plata en cantidad de turistas.
Fue hasta 1985, cuando las aguas de la laguna que llevaron al pueblo a su esplendor, crecieron e inundaron por completo el territorio. Debido a las lluvias y a una serie de obras inconclusas, el muro que protegía a Villa Epecuén cedió y el lago la inundó.
Sus habitantes fueron evacuados de emergencia y perdieron todo. El trabajo para la evacuación concluyó en 15 días y no hubo ninguna fatalidad, a pesar de que se tuvo que trasladar hasta los féretros del cementerio.
Dos años más tarde de aquél primer aluvión, llegó un segundo, que inundó al pueblo por dos décadas. Hasta 1993, la ciudad quedó sumergida 7 metros bajo el agua. Con el paso del tiempo, la crecida fue disminuyendo y dejó a la vista el trazado de las calles, el dique de contención y las ruinas de las casas, hoteles y edificios emblemáticos.
La zona fue declarada Reserva Natural Municipal y hoy ofrece circuitos turísticos para viajeros nacionales e internacionales que quieren recorrer la villa, probar las propiedades curativas del agua y visitar las ruinas. Actualmente el nivel de agua ha bajado casi por completo. ¿Podría ser Epecuén un anticipo del futuro para la región?
Hacia el sur de la costa bonaerense, el peor escenario haría desaparecer todas las ciudades hasta Mar del Plata
Si ha tenido la oportunidad de viajar a Río de Janeiro y visitar ‘El Museo del Mañana’, una de las maquetas que asusta es el panorama sombrío que le espera a numerosas ciudades costeras, que se verían fatalmente afectadas ante el crecimiento de los océanos y mares. En el corazón del museo hay una instalación impactante, un conjunto de imponentes “tótems digitales”, con sonido envolvente, de aproximadamente diez metros de altura que le brindan al visitante datos e imágenes sobre el lugar en el que la humanidad se encuentra actualmente. Se proyectan videos con bosques en llamas, glaciares que se derriten, animales en extinción, contaminación ambiental, las emisiones de gases de efecto invernadero y las últimas cifras sobre el consumo de energía, agua y carne vacuna. “Llevamos doscientos mil años viviendo en la Tierra; desde 1950 hemos modificado el planeta más que en toda nuestra existencia”.
Esta semana, se conoció un nuevo mapa interactivo que permite ver qué áreas del mundo podrían sufrir ante el aumento del nivel de los mares, provocado por el cambio climático, un panorama desolador que podría llegar a hacer desaparecer vastas áreas de la costa argentina nada menos que en el año 2050 si la situación climática continúa empeorando. El mapa, creado por Climate Central, permite ver los efectos que el crecimiento del nivel de los océanos tendría en el mundo, y muestran el alcance de las aguas sobre la costa de la provincia y la Ciudad de Buenos Aires.
¿Podría ser Epecuén un anticipo del futuro para la región?
BAJO EL AGUA
Con el crecimiento de dos metros, la ciudad de Buenos Aires quedaría bajo el agua y aunque parece que faltara una vida, las proyecciones anticipan que para el año 2.100 gran parte del paisaje de la provincia de Buenos Aires y Entre Ríos serán totalmente diferentes. Para ese año, ambas provincias, junto a numerosas regiones de América Latina, quedarían bajo el nivel del mar a causa del cambio climático.
“El calentamiento global ha elevado el nivel del mar alrededor de 20 centímetros desde 1880, y la tasa de aumento se está acelerando. El aumento del nivel del mar aumenta drásticamente las probabilidades de que se produzcan inundaciones dañinas a causa de las marejadas ciclónicas”, advierte la investigación.
Según el informe de Climate Central, varios puntos de Entre Ríos, por donde transcurren los ríos Uruguay y Paraná, así como la provincia de Buenos Aires, a la altura de la bahía de Samborombón, quedarán bajo el agua… dentro de 80 años.
Las proyecciones indican que con un aumento de la temperatura global de 0,5°C, las aguas podrían aumentar unos 70 centímetros en la zona central de la provincia de Buenos Aires y el Delta del Paraná. Con un aumento de 1°C, el nivel de las aguas crecería a más de 2 metros, según se ve en el mapa interactivo de Climate Central.
Con un aumento de la temperatura global de 2 grados, las aguas cubrirían parte de los territorios bonaerense y entrerrianos aumentarían hasta los casi 5 metros. Un aumento de 3°C significaría aguas por encima de los 6 metros, mientras con 4°C, la situación sería catastrófica, con casi 9 metros de altura, de acuerdo con las proyecciones de la ONG estadounidense que analiza e informa sobre climatología.
El aumento del nivel del mar inundaría las zonas costeras de CABA, el sur del Conurbano, La Plata y localidades como Campana y Zárate
PROYECCIONES CATASTRÓFICAS
Las proyecciones muestran que el aumento del nivel del mar inundaría las zonas costeras de la Ciudad de Buenos Aires, el Sur del Conurbano bonaerense, La Plata, y localidades como Campana y Zárate. Hacia el sur de la costa bonaerense, el peor escenario haría desaparecer todas las ciudades hasta Mar del Plata.
El Acuerdo de París de 2015 fija que el aumento de la temperatura debe mantenerse lo más cerca posible a 1,5 °C, aunque las predicciones científicas alertan de que esta cifra llegará a superarse entre 2030 y 2050. Los científicos señalan que, si la Humanidad toma medidas urgentes contra el calentamiento del planeta, es posible que la temperatura global pueda reducirse y estar por debajo de 1,5°C hacia el año 2100.
El nivel global de los océanos aumentó unos 20 cm desde 1900, y el ratio de crecimiento prácticamente se triplicó en la última década, según el informe del IPCC. Las capas de hielo que se deshacen en la Antártida y en Groenlandia son ahora el principal factor, por delante del deshielo de los glaciares.
Si las temperaturas globales aumentan 2 ºC, el nivel de los océanos subirá cerca de medio metro en el siglo XXI. Y seguirá aumentando hasta casi dos metros para 2300, el doble de lo que el IPCC vaticinaba en 2019. Debido a la incertidumbre aparejada a las capas de hielo, los científicos no pueden descartar un aumento del nivel de las aguas de hasta dos metros para 2100. -