El 28 de julio pasado, en el marco del festival “El Tango en Junín”, organizado por la comuna local, la orquesta típica “La Juan D’ Arienzo” tocó en el teatro de la Ranchería, ante un lleno completo de público de todas las edades. El programa se completó con la actuación de la exquisita cantante juninense, Claudia Levato. Además, se presentó Ariel Ardit, una de las voces más trascendentes de la actualidad del dos por cuatro, con un repertorio que generó la unánime aprobación de la platea. Alejandra Lacio, con su característica perfecta dicción y buen gusto, marcó las presentaciones.

“La Juan D’ Arienzo”, fundada a mediados de 2012 con la finalidad de recrear el estilo del “Rey del Compás”, quien estableció un antes y un después en el tango a partir de los años 30, es una agrupación joven, integrada por talentosos músicos. Dirigida por el bandoneonista Facundo Lázzari, completan la línea de bandoneones Ricardo Badaracco, Oscar Yemha y Lucas Pantarotto; en violines, Pablo Ginzburg, Emilio Pagano y Juan Pablo Cravenna; en piano, Pablo Valle; en contrabajo, Andrés Santarsiero, y la voz de Fernando Rodas.

En sus diez años de trayectoria, ha realizado más de veinte giras por Europa, América y Asia, visitando Italia, Alemania, Portugal, Dinamarca, Francia, Inglaterra, Estados Unidos, Canadá, Brasil, Colombia, Japón y Taiwán, entre otros. A su vez, ha recorrido el país llevando su inconfundible estilo por casi todas las provincias argentinas. La orquesta ha editado tres álbumes: Cortando Clavos (2014), Siciliano (2018) y Bienvenido a este sector (2018), siendo galardonada con el Premio Tango a la Mejor Orquesta 2018.

El 1° de febrero pasado “La Juan D’Arienzo” se presentó en el Tokyo Bunka Kaikan, uno de los principales teatros de Japón, ante más de 2.000 personas, que colmaron la sala y aplaudieron sin cesar el formidable espectáculo tanguero de música, canto y baile.

La presentación formó parte de la gira de un mes por Japón organizada por la Asociación de Conciertos Min-On, que incluyó fechas en 19 ciudades del país: Kitakyushu, Fukuoka, Kurashiki, Nagoya, Yokohama, Tokio, Kawasaki, Okayama, Hiroshima, Hachioji (Tokio), Koriyama, Kushiro, Sapporo, Iwate, Sendai, Kanazawa, Kyoto, Wakayama y Osaka.

Los artistas argentinos deslumbraron en cada actuación y, una de sus performances, “Este es el Rey” de (Lázzari-Polito-Caballero), en Kitakyuyu, Japón, quedó registrada en un video que ya está disponible en el canal de Youtube de la orquesta.

Con un amplio repertorio que abarcó distintas épocas del legado del maestro D’Arienzo, entre tangos clásicos y aquellos menos conocidos e incorporando temas propios, la orquesta trajo a Junín su nueva producción Siciliano, que es el nombre de un tango del álbum, compuesto por Facundo, su director.

Facundo Lázzari, director de la orquesta, reconoció que “el público en general nos recibe muy bien y con mucha calidez, nos tratan de una manera maravillosa. Es muy positivo que se apueste a orquestas de tango, de gente joven, a artistas que quizás no tiene una difusión a nivel radial o televisivo, que les brinde la posibilidad de ser conocidos”.

Respecto de su visión sobre la actualidad del tango, el músico definió: “El tango, hoy, está abierto a todas las edades, tanto para gente de 70 u 80 años, que le trae unos recuerdos maravillosos, como para chicos de 15 años, que está bailando y experimentando la vida y la encuentra a través del tango, y nosotros somos partícipes de todo eso. Apostar a la cultura es apostar a eso”, remarcó en relación con el aporte cultural que realizan y la presencia institucional en la iniciativa.

Al estilo de una de las más grandes orquestas de la historia del tango, “La Juan D’Arienzo” aporta una valiosa renovación al tango y ha conquistado no sólo las pistas nacionales, sino que su talento es reconocido a nivel internacional.

El director, Facundo Lázzari, es nieto de Carlos Lázzari (9 de diciembre de 1925 – 7 de junio de 2009), recordado bandoneonista, quien fue además arreglador y primer fueye de la orquesta de Juan D’Arienzo, desde 1950 hasta el fallecimiento del “Rey del Compás”, y continuó luego su carrera al frente de “Los Solistas de D’Arienzo”.

Entre otras páginas, la orquesta deslumbró en Junín con estos instrumentales: “Desde el alma” (vals de Rosita Melo, Homero Manzi y Víctor Piuma Vélez), “Este es el rey” (Manuel Caballero), “Gallo ciego” (Agustín Bardi), “La puñalada” (milonga de Pintín Castellanos y Celedonio Flores) y “La cumparsita” (Gerardo Matos Rodríguez). La voz de Fernando Rodas levantó a la platea, con los siguientes tangos: “Canzoneta” (Erma Suárez y Enrique Lary), “La última copa” (Francisco Canaro y Juan Caruso), “Paciencia” (Juan D’ Arienzo y Francisco Gorrindo) y “Quiero verte una vez más” (Mario Canaro y José María Contursi).

UN TANGUERO DE LEY

“Juan D’ Arienzo fue uno de los músicos más queridos. El público disfrutaba cuando lo veía gesticular frente a los músicos y los cantores; lo veía con simpatía, había algo de nostalgia y algo de burla. Por supuesto, el compás de la orquesta se llevaba tras de sí los pies de los bailarines. Y los pies de los bailarines siguen yéndose con el compás cuando suenan los discos de D'Arienzo, y su figura continúa suscitando una gran simpatía. Se la merece por lo que hizo por el tango al promediar la década de 1930", dice José Gobello (escritor, poeta y ensayista, especialmente sobre el lunfardo. Fue fundador, miembro y presidente de la Academia Porteña del Lunfardo).

D'Arienzo nació el 14 de diciembre de 1900, en el barrio porteño de Balvanera, y murió en Buenos Aires el 14 de enero de 1976, a los 76 años. Estuvo al frente de su orquesta hasta un año