

Juan Parodi renunció a la dirección de la TV pública, que se quedará sin programación a partir del miércoles y dejaría de transmitir, en exclusiva en febrero. Parodi era hasta este viernes el gerente de programación del canal estatal y en las últimas horas se reunió con el secretario de Prensa de la Nación, Eduardo Serenellini. En la reunión también estuvo Héctor Cavallero, director de Radio Nacional, que el Gobierno también quiere cerrar.
A todo el personal técnico y de operaciones de la TV Pública le pidieron que se tomaran los francos acumulados. Con esto buscan que durante los feriados de Semana Santa no haya nadie en el canal para poner vallas.
Los pocos programas que quedan terminarán el miércoles. Oficialmente, ya se informó que tres programas diarios de la grilla finalizarán a fin de mes, entre ellos el magazine gastronómico Cocineros argentinos, que llevaba 15 años ininterrumpidos al aire, era el ciclo más visto del canal y el que mejor rendía comercialmente. Además, el área de noticias sufrirá un fuerte recorte: se levantarán los noticieros diarios de la primera mañana y de la medianoche, así como todos los del fin de semana. En asamblea, los trabajadores de la TV Pública denunciaron “que nunca en nuestra historia vivimos los niveles de censura como en esta etapa”.
La situación de los medios públicos es crítica. La decisión del gobierno de Milei de “privatizarlos” avanza desde todos los frentes. Si el primer paso fue instalar en agenda la venta como una posibilidad cierta, la segunda etapa ya se puso en marcha: recortarlos a su mínima expresión. Para eso, al plan de desfinanciamiento se le suma la estrategia de “apagarlos”, quitándole contenido para que sean poco competitivos y (auto)crear así las condiciones para su “remate”.
Las últimas noticias de la TV Pública son la prueba de que el diseño institucional se construyó alrededor de esa idea. Lo que se supo oficialmente es que el 31 de marzo finalizan las emisiones de tres programas en vivo que se emiten en el canal: Cocineros argentinos, En casa y Más de vos.
El recorte, entonces, no parece descansar estimulando la creatividad, sino a pura “motosierra”, como le gusta gritar a los cuatros vientos al presidente de la Nación. “Todas las decisiones obedecen a recortes presupuestarios; no hay otros motivos”, aclararon desde la actual gestión del canal estatal.
El recorte presupuestario no se limitará al levantamiento de algunas ediciones de los noticieros: Los días feriados la TV Pública no emitirá ningún noticiero. Casualidad o no, esa medida comenzará a aplicarse desde este domingo, justo cuando se conmemora un nuevo aniversario del último golpe de Estado, se espera una movilización popular masiva y el gobierno reivindica el accionar de las Fuerzas Armadas durante la dictadura.
Por otro lado, la Asamblea de Trabajadores de Prensa Televisión Pública (Sipreba) emitió un fuerte comunicado, en el que denunciaron “que nunca en nuestra historia vivimos los niveles de censura como en esta etapa”. “Durante otras etapas políticas, con gestiones que respondieron a diferentes gobiernos de turno, hemos tenido diferencias, críticas e incluso denuncias públicas, a las que se puede acceder fácilmente en internet. En ningún caso hubo un nivel de censura tan grotesco como en este. Un ejemplo cabe para ilustrarlo: en la transmisión de la apertura de sesiones del primero de marzo por cadena nacional, sólo se mostraron legisladores oficialistas, en una paradoja construida en base a planos cortos para tapar el sol con la mano; ya que La Libertad Avanza cuenta con una notoria minoría en el parlamento”.