LOCALES | 26 dic 2024
SALUD
Junín sigue entre las ciudades con más porcentaje de arsénico en el agua
07:47 |Junín y gran parte de la región se mantiene entre las zonas donde el agua no sería apta para el consumo humano.
Según un estudio publicado por la revista Water and Health, más de 17 millones de argentinos están expuestos al consumo de agua contaminada con arsénico. Este elemento químico, presente en los acuíferos pampeanos, varía su concentración dependiendo de la profundidad del pozo del que se extrae el agua.
En nuestra ciudad, como en otras partes de la Provincia de Buenos Aires, los niveles de arsénico son alarmantes, alcanzando hasta 280 partes por billón (ppb) en algunos pozos.
Una entidad a nivel nacional que muestra cómo evoluciona el nivel de arsénico en el vital líquido es el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), que desarrolla desde 2011 la confección de un mapa donde se monitorea cuáles son las zonas del país con mayor presencia del metaloide en las aguas.
En este relevamiento se destaca las áreas geográficas del país que tienen una concentración de arsénico superior a lo recomendado y que pueden generar patologías en el Interior de la Provincia de Buenos Aires, donde hay muchos territorios donde encontraron arsénico.
De acuerdo al ITBA, el noroeste bonaerense cuenta con altos niveles de arsénico en agua. Hay varios municipios donde el agua cuenta con más de 50 partes por billón (ppb) de arsénico por litro, es decir 0,05 miligramos por litro (mg/l).
En esa nómina aparece Pergamino, además de Tres Arroyos, Balcarce, Junín, Mar de Ajó, 9 de Julio, Carlos Tejedor, Monte, Lobos, Navarro, Suipacha, General Las Heras, San Vicente y Cañuelas.
En algunos de los pozos ubicados en estas regiones la presencia del arsénico es más que alarmante, con hasta 280 ppb por litro, razón por la cual es vital que no se use para consumo. Hay otros pozos que se encuentran en el rango medio, donde la presencia de arsénico en el agua es entre 10 y 50 partes por billón (ppb), de 0,01 mg/l a 0,05 mg/l. En este caso, aparecen en alerta zonas de Villarino, Necochea, Mar del Plata, Coronel Suárez, Pehuajó, Olavarría, Azul, Tandil, Balcarce, Ayacucho, 25 de Mayo, La Plata, San Nicolás, Arrecifes, Zárate y varios municipios del Conurbano.
La ingesta prolongada de agua contaminada puede derivar en enfermedades graves, como el Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (HACRE), así como otros problemas de salud como cáncer de pulmón y fibrosis pulmonar. Por eso, las autoridades sanitarias advierten sobre la importancia de no consumir agua contaminada ni utilizarla para cocinar.
Esta situación lleva a que muchos habitantes de la zona sigan muy preocupados -como hace varios años- por la calidad del agua que consumen. A pesar de que el Gobierno bonaerense reconoce este problema histórico, aún no hay una solución definitiva implementada desde el Municipio, que, por el contrario, no reconoce la realidad e inclusive niega cualquier estudio calificado a nivel mundial como los del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) o los de la Estación Experimental Agropecuaria Balcarce del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).