LOCALES | 11 ene 2025
OBRA PUBLICA FRENADA
Bajo nivel: una propuesta profesional para seguir adelante
07:46 |“Hoy la obra está paralizada, y el gobierno local propone dilapidar 1.800 millones de pesos para tapar los cimientos y abandonarla definitivamente, un acto que refleja, sin duda, un fracaso como sociedad”, indicó el arquitecto y ex funcionario Agustín Pinedo, en una carta dirigida a SEMANARIO. Los detalles.
Por: Redacción Semanario de Junín
El ex secretario de Obras Públicas, Agustín Pinedo, a través de una nota enviada a nuestra redacción, brindó su mirada respecto la -hasta el momento- fallida obra del paso bajo nivel en la avenida Rivadavia.
El arquitecto, quien trabajó en proyectos relacionados con el tema durante la gestión anterior a cargo de Mario Meoni, sostiene que “desde hace muchos años, los juninenses han bregado por una obra que consideran necesaria para integrar dos sectores importantes de la ciudad y darle continuidad a una arteria comercial clave” y puntualiza que “nunca estuvimos tan cerca de lograrlo, luego de sortear tantos obstáculos”.
Explica Pinedo que “en 2021, al publicarse en los medios locales el proyecto elaborado por Ferrocarriles, pude conocer los detalles y a mi juicio lamentablemente, el diseño no cumplía con las expectativas de quienes habíamos trabajado con anterioridad, ni con las opiniones que recogimos en aquel entonces por parte de la ciudadanía”.
Hace hincapié en que en ese entonces “ante la pasividad del municipio, que no hizo observaciones sobre un diseño que impactaría negativamente a la ciudad, publiqué una severa crítica en los medios, que llevó a un rediseño parcial por parte de la empresa”.
En aquel entonces Pinedo y colaboradores habían expresado respecto al nuevo proyecto que: “l pasaje es angosto, carente de espacios abiertos, maltrata al peatón con un entorno que no favorece su circulación, su seguridad ni sus vistas”.
Añadían que “se circula al borde de un precipicio de hasta cuatro metros, para luego descender tres metros por una escalera en trinchera, para continuar por un pasaje estrecho. La misma situación sufren quienes deben descender por la rampa para discapacitados. Este recorrido es agobiante física y mentalmente, además de exponer a los peatones a la inseguridad y la suciedad”.
“Nada tiene que ver con un paseo que integre el centro de la ciudad” puntualizaban.
En aquel momento, desde el Ejecutivo municipal no hubo críticas sobre la obra desde el punto de vista profesional, sino que en la mayoría de los casos se centraron en una supuesta “afectación de los vecinos” por la obra, a sabiendas que todo desarrollo genera este tipo de contratiempos que son recompensados con la obra terminada.
Pinedo también criticó el proyecto llegado desde el gobierno nacional, indicando que “destruye las veredas comerciales en la esquina de Jean Jaures, con colectoras vehiculares innecesarias. La rampa vehicular se extiende hasta casi la mitad de la cuadra entre Jean Jaures y Juan B. Justo, solo para mantener la vía de acceso a los talleres que se puede hacer desde otro lado”.
“Hay que hacer el esfuerzo: afinar la propuesta, trabajarla con la empresa, gestionarla políticamente y elevarla a la Nación”
LO QUE SI
Pinedo asegura que “la continuidad urbana no se logra simplemente con la continuidad sin interrupciones de una calle vehicular, es mucho más que eso, se trata de la integración urbana de la ciudad a partir de generar un continuo espacial y de uso social, propio de propuestas urbanísticas, y no solo de soluciones vehiculares”.
Expresa que “la propuesta no debe incluir obstáculos físicos que impidan la continuidad espacial. Se deben evitar las circulaciones verticales en trinchera y crear espacios abiertos que permitan la continuidad visual y funcional entre ambos lados del puente, evitando crear áreas conflictivas o inseguras” además de señalar otros tantos puntos a corregir.
“He analizado el estado actual de la obra y concluyo que la mejor opción es terminarla, ajustando el diseño para hacerlo más económico y funcional”
INVERTIR EN CONSTRUIR
En su carta dirigida a nuestro medio, Pinedo realiza consideraciones en el contexto en que “cuando parecía que el puente finalmente se concretaría, surgió un fenómeno político que no pretende administrar el Estado, sino destruirlo, que prioriza demoler sobre construir”.
Indica que “hoy la obra está paralizada, y el gobierno local propone dilapidar 1.800 millones de pesos para tapar los cimientos y abandonarla definitivamente, un acto que refleja, sin duda, un fracaso como sociedad”.
Ex Secretario de Obras Públicas Municipal, Arq. Agustín Pinedo.
De este modo propone lo que denomina “Premisas básicas”, en el sentido de que “la obra es necesaria” y por ese motivo “tapar lo hecho es un fracaso”, destacando que “es mejor invertir en construir que en demoler”.
Habida cuenta de su conocimiento del área, afirma que “la municipalidad cuenta con recursos técnicos y personal capacitado” motivo por el cual considera que “debemos negociar con el gobierno nacional con una propuesta viable”.
Y expresa que “con el afán de aportar un esbozo de posibles soluciones, he analizado el estado actual de la obra y concluyo que la mejor opción es terminarla, ajustando el diseño para hacerlo más económico y funcional”.
Entre las propuestas que manifiesta considera:
“Eliminar por innecesaria la New Jersey (estructura de hormigón armado que se utiliza como separador de flujos de tráfico), las rampas en trincheras y la encrucijada sobre Jean Jaures”.
Que el municipio “se haga cargo de varias obras a ejecutar por administración, con aporte de materiales, maquinarias, equipos y personal propio, y otras mediante contratación de mano de obra. Este sistema permite importantes ahorros, siempre que se elimine la intermediación, que incrementa considerablemente las imposiciones impositivas, los beneficios y los gastos generales”.
De esa manera la administración municipal tomaría a su cargo los siguientes trabajos: “demoliciones faltantes; movimientos de suelos faltantes; pavimentos; desagües pluviales; señalización; relleno y compactación de circulaciones; equipos e instalaciones electromecánicas; obras de adecuación de la vía pública”.
“Ante la pasividad del municipio, que no hizo observaciones sobre un diseño que impactaría negativamente a la ciudad, publiqué una severa crítica en los medios”
Pinedo continúa al respecto: “la empresa seguiría con los siguientes trabajos como seguridad y medio ambiente, obrador, interferencias, muros y pilotes, estructura de hormigón y barandas de circulaciones como puente ferroviario, estación de bombeo y proyecto ejecutivo”.
A la hora de volcar los números para el financiamiento, el ex funcionario explicó que “la municipalidad debería desembolsar, a precio de contrato de fecha 2021, la suma de 145 millones. La empresa debería ejecutar trabajos por 395 millones. Estas sumas, actualizadas, representan para el municipio 2.030 millones más IVA y, para la empresa, 5.530 millones más IVA”.
Considerando que “para la municipalidad, la inversión podría ser mucho menor mediante la ejecución por administración, utilizando además maquinarias y personal propio. Esto reduciría la cifra, seguramente, a los 1.800 millones previstos para demoler y tapar”.
Más aún, durante un año, toda la inversión prevista en obras públicas “debería destinarse a terminar esta obra y si fuese necesario, ante la falta de respuesta del gobierno nacional, asumir el desafío de completarla igualmente, recurriendo a fuentes de financiamiento como préstamos del Banco de la Provincia de Buenos Aires u otras opciones, como un fideicomiso similar al que en su momento financió las obras del autódromo y alrededor de 150 cuadras de pavimento en la ciudad”.
Para terminar Pinedo reflexiona acerca de que “hay que hacer el esfuerzo: afinar la propuesta, trabajarla con la empresa, gestionarla políticamente y elevarla a la Nación, con la esperanza de que se comprenda el esfuerzo de la comunidad de Junín, que no solo pide, sino que también aporta”, concluye.