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Un aterrador descubrimiento ocurrió en una casa de Ostende, partido de Pinamar, donde obreros que realizaban una obra hallaron al menos cuatro cráneos y tras ese descubrimientos fueron apareciendo más restos humanos. El hallazgo se produjo en las callaes Argel y Ayacucho.
En este sentido, la policía bonaerense se encuentra trabajando en el lugar de los hechos y ya se abrió una investigación para tratar de determinar el origen de los restos humanos.
Este episodio no es un hecho aislado. Casos similares han ocurrido en los últimos meses en otras ciudades del país. A principios de febrero de este año en la ribera del partido de Quilmes, la Policía Bonaerense encontró 17 cráneos humanos junto a uno de plástico. El hallazgo se produjo en la playa ubicada en la rotonda de las calles Cervantes y Echeverría, tras la alerta de un automovilista que circulaba por la zona.
En octubre, un feto de aproximadamente tres meses fue encontrado en una vereda en La Plata, en la esquina de las calles 72 y 134, entre los residuos de una pila de basura. El pasado 28 de diciembre, en Wilde, partido de Avellaneda, un vecino que revisaba la basura en busca de ropa encontró frascos de vidrio con fetos humanos dentro de un contenedor.
También, en febrero del año pasado, un hombre halló otro feto de 18 semanas de gestación en una cloaca de Ingeniero White, Bahía Blanca. En este último caso, la autopsia determinó que la causa de muerte fue insuficiencia respiratoria por desprendimiento placentario, lo que sugiere un posible aborto espontáneo.