

Se limpió el conducto de hormigón por cuyo interior corre el arroyo Napostá, en Bahía Blanca, después de 45 años. El tramo es de poco menos de 4 mil metros que cruza la ciudad, entre calles Casanova y Estados Unidos.
Atento a la inundación ocurrida el pasado 7 de marzo, con la caída de casi 400 mm de lluvia en unas 6 horas sobre la cuenca inferior del arroyo, es que en las últimas semanas se trabajó en la limpieza general del arroyo Napostá, entre el partidor del parque de Mayo y la desembocadura en el estuario, señala un artículo publicado en lanueva.com.
La provincia contrató una empresa bahiense, considerando la urgencia y necesidad de poner en condiciones adecuadas el curso de agua en caso de producirse una nueva crecida.
El periodista autor de la nota Juan Ignacio Zelaya señala que una tarea tan necesaria como indispensable que debiera ser parte de una agenda regular que asegurara su realización de manera periódica. Si bien es un trabajo que corresponde a los organismos hidráulicos provinciales, la experiencia indica que resulta complejo conseguir una respuesta en tiempo y forma, con lo cual, teniendo en cuenta las muy malas consecuencias que supone tener el entubado en malas condiciones al complicar el escurrimiento del agua, debiera ser incluida en el cronograma de obras que realiza la municipalidad.