

Por: Escribe Raglia, especial para Semanario
SECCIÓN HIPHOP PUBLICADA EN LA EDICIÓN IMPRESA Y EDICIÓN DIGITAL Nº 472 DE SEMANARIO DE JUNÍN. SEMANA DEL 26 DE JULIO AL 1º DE AGOSTO DE 2025
En las últimas notas, en que hablamos de discos de distintos artistas, encontramos una similitud entre varios donde el álbum es obra, tanto del rapero como del productor (Rome Streetz y Conductor Williams o H de Perra y C. Spaulding para referenciar).
En esta ocasión nos encontramos con la continuación de uno que se corría el rumor hace un tiempo. “Alfredo 2” es la obra perfecta para ser la continuación de “Alfredo”, álbum salido en mayo 2020 realizado por dos tipos gigantes y sabios en su rubro: Freddie Gibbs y The Alchemist.
Pero antes que nada tenemos que entender quién es cada uno –a pesar de ya haber sido nombrados en notas anteriores- para que se entienda la importancia de esta obra.
Por un lado, Freddie Gibbs, rapero de Indiana, una zona de la cual no es común escuchar de raperos estrellas salidos de allí. Algo que Freddie pudo dar vuelta para, hoy en día, considerarla un nombre fuerte gracias al Gangsta Rap que hace este rapper. Teniendo discos en solitario y en conjunto con otro productor como Madlib, hicieron juntos dos obras muy aclamadas por el público como lo son: “Piñata” en el año 2014 y “Bandana” en el 2019, mostrando de este modo que cada vez que Gibbs elige una palabra cualquiera en español para título de un disco, saca obras increíbles.
Incluso fue nominado a un Grammy en el año 2020 gracias a “Alfredo” junto a The Alchemist.
Por el otro lado, The Alchemist es un productor con todas las letras, activo desde ya hace varios años, siendo cómplice de varios raperos para crear clásicos que perduran con los años; desde “Super Tecmo Bo” con el integrante de “Griselda” Boldy James, “The Great Escape” junto a Larry June, recientemente en una canción con la cantante Erykah Badu llamada “Next To You”, o con el ídolo del Drumless, Roc Marciano, que no está de más anunciar que estará presente el día jueves 11 de septiembre en el club Museum de CABA, el mismo lugar adonde tuvo lugar la cita para ver a Conway The Machine.
Alfredo, en un mayo de hace cinco años fue increíble. El título es un acrónimo de Freddie Gibbs y The Alchemist (ALFREdo). Un álbum con un sonido exacto para la época. Las colaboraciones justas, Rick Ross, Tyler The Creator, Conway y Benny The Butcher eran los que conformaban el resto del equipo.
Portada de “Alfredo 2”.
Con una portada interesante de una mano con una barra que utilizan los titiriteros, pero en vez de agarrar una marioneta está agarrando un plato de pasta, presentando el primer sencillo (“1985”) un día antes del lanzamiento del disco.
“Michael Jordan, 1985, bitch, I travel with a cocaine circus”
Freddie Gibbs en “1985”.
Año 2025 y nos encontramos con el “notición” de “Alfredo 2” a la vuelta de la esquina, un disco que promete el mismo técnico de Rap que vimos en su primera parte, pero con un toque más oriental.
Desde la portada se nota el mismo concepto, pero sobre un plato de ramen japonés, mostrando el primer y único sencillo el 17 de julio “1995”.
Entre el título de un simple y el otro pasó el doble de tiempo que en la espera de la segunda parte del disco.
Presentando la tracklist como si fuese el poster de una película, podemos notar una “división de actos” donde se encuentran las canciones del álbum. Vemos así colaboraciones con Anderson Paak, Larry June o J.I.D. Canciones que combinan perfectamente con la estética que quiere dar el disco, además de presentar realmente un cortometraje que se parece a una interesante mezcla entre una especie de Karate Kid pero envuelta en un boom bap y “slang” callejero con el rapero y productor estrella de protagonistas. Si están interesados en verla pueden encontrarla en YouTube.
Alfredo 2 en un disco que llegó para quedarse y volverse un clásico instantáneo al igual que su precuela. Es claro que peleará para el Grammy como ya lo hicieron antaño e incluso tiene una gran chance de ganarlo.
Cuando el equipo funciona bien saben que no tienen que moverlo, Freddie Gibbs y The Alchemist entienden eso a la perfección.