El falso policía detenido en las últimas horas tras ser descubierto cuando raptaba a una menor de 12 años en la localidad bonaerense de Chacabuco, se negó a declarar ante la fiscal Vanina Lisazo, a cargo de la causa en la que lo imputó por rapto con fines sexuales, usurpación de títulos y honores con coacción y abuso sexual infantil.

El sospechoso hizo uso de su derecho de abstenerse a dar su declaración en la Justicia y posteriormente fue trasladado a la comisaría de General Pinto, donde quedará alojado hasta que se determine su eventual prisión preventiva. Se trata de una dependencia policial que alberga a los imputados por delitos de contenido sexual, explicaron a este medio.

Según explicó la fiscal Vanina Lisazo, todo indica que se trataba de un hecho con fines de trata, y que el secuestrador planeaba llevarla a Brasil. Lisazo destacó que, gracias al rápido accionar de las fuerzas de seguridad y a la denuncia inmediata de la madre, la menor fue rescatada a tiempo. “Hoy no estamos hablando de una nena desaparecida gracias a la intervención de todos”, subrayó.

En cuanto al vínculo entre la víctima y el secuestrador, la fiscal señaló que la captación de menores muchas veces se da a partir de que “alguien las haga sentir importantes”, generalmente a través de una imagen construida. “En este caso, ella creía estar enamorada”, concluyó.

El próximo paso para las autoridades es determinar con qué fin intentaba llevarse a la víctima fuera de Argentina. Entre las hipótesis, evalúan si fue porque el hombre está vinculado a una red de trata de personas o si era un “negocio de él” para después venderla, explotarla sexualmente o para hacerla trabajar.

No obstante, las fuentes del caso explicaron que la carátula del expediente podría modificarse una vez que se realice el peritaje de los teléfonos celulares del sospechoso y la menor. “Vamos a tener muchos más elementos”, aseguraron.

"Quiero que investiguen a fondo"

Carina Olguín, madre de una niña de 12 años secuestrada en Junín, relató la angustiante experiencia que vivió cuando su hija fue llevada en tren hacia Buenos Aires por un hombre de 32 años, con quien había tenido contacto telefónico una semana antes. Según contó, el sujeto engañó a la menor con la promesa de un viaje a Brasil.

La rápida denuncia y la eficaz intervención policial permitieron rescatarla en la ciudad de Chacabuco, evitando que el caso tuviera un desenlace aún más grave.

La madre expresó su temor por posibles amenazas, mencionando la presencia de vehículos sospechosos cerca de su vivienda. Karina considera que podría tratarse de un caso vinculado a una red de trata de personas y pidió que se investigue a fondo, incluyendo el posible rol de un taxista o remisero que habría trasladado al hombre junto a la menor.

Si bien agradeció la rápida acción de la policía, la madre remarcó la importancia de que la justicia actúe con celeridad y profundidad para esclarecer los hechos y procesar a todos los involucrados.

Tanto ella como su hija recibirán asistencia psicológica para afrontar el trauma vivido.