Por: Redacción Semanario de Junín

EDITORIAL PUBLICADO EN LA EDICIÓN IMPRESA Y LA EDICIÓN DIGITAL Nº 478 DE SEMANARIO DE JUNÍN. SEMANA DEL 6 AL 12 DE SEPTIEMBRE DE 2025

“En el ‘Diario de la guerra del cerdo’, Adolfo Bioy Casares ubica como protagonista principal a Isidoro Vidal, un jubilado que un día descubre que los jóvenes han decidido comenzar a atacar, amenazar y matar a los viejos”.

“Publicada en 1969 y llevada al cine en 1975 bajo la dirección de Leopoldo Torre Nilson, el autor jamás se podría haber imaginado que algún día pasara algo similar, pero pasa. Aunque más solapado, pasa. En Junín pasa”.

“No hay un dato exacto porque todo se intenta tapar por parte de funcionarios que miran al resto desde un estrado del confort. Pero se calcula que al menos 15 jubilados han muerto en estos dos años esperando un turno médico, debido al colapso que sufre la atención sanitaria al sector pasivo en nuestro medio”.

Los párrafos precedentes son el inicio de un artículo publicado en la tapa de SEMANARIO en septiembre de 2019, bajo el título “Matar al Abuelito”.

Hoy asistimos a una situación similar, generada por medidas de un gobierno insensible que recortó derechos de los sectores más vulnerados como el de los jubilados y los discapacitados con el objetivo de contener el dólar y bajar la inflación, y lo único que lograron es convertir la vida de la gente en un calvario, porque la economía sigue descontrolada igual que antes y los expertos de las finanzas se la siguen llevando en pala.

Todo salpicado con fundadas sospechas de corrupción y mala praxis de las que nadie parece asumir la responsabilidad en un escenario electoral aborrecible, sin ideas, sin proyectos, con ganapanes tras de un puesto político.

La realidad nos pega de lleno acá en casa, adonde un afiliado al PAMI se muere a la espera de recibir un marcapasos -uno- que no se hallaba disponible en una agencia como la de Junín que debe atender a una región con centenares de miles de jubilados y pensionados.

Una improvisación digna de los militantes miserables de nuestra ciudad que hace un par de meses se pelearon en una interna feroz, sin el más mínimo recato, mostrando a las claras que sus intenciones políticas no juegan a favor de la gente sino al saqueo premeditado que acontezca a favor de sus intereses personales. Para muestra está lo que hacen sus jefes en los más altos cargos nacionales.

Para muestra está que hayan nombrado de director en el PAMI regional a un neófito de la política, sin experiencia en gestión pública y sin el más mínimo conocimiento de la gerontología. Un profesor de inglés de 32 años.

Pero no sólo eso. Eligieron para ocupar la titularidad del departamento médico del instituto a una “pediatra” (hija del juez federal de Junín), como si no alcanzara con el desprecio hacia los adultos mayores y por eso le sumaran una burla macabra.

El resultado no podía ser otro que el cúmulo de improvisaciones narrado por el hijo del fallecido en el canal de televisión de Junín y transcripto en esta edición.

Claro está que no debemos dejar de lado que las responsabilidades son compartidas, ya que a los gobiernos los sigue eligiendo el ciudadano.

Si, usted, querido lector.