En estos últimos días, parecen haberse hecho más laxos los controles dentro de la ciudad sobre la circulación de personas. Hay menos policías (muchos están licenciados) cumpliendo tareas y ahora parece que los operativos en los ingresos a la ciudad también han aflojado.

La denuncia en este caso fue realizada por una médica juninense en sus redes sociales. La doctora Sarita Loizaga denunció que llegó a la ciudad después de hacer una guardia en otra localidad, y “no había nadie que controle nada, no había ninguna autoridad de nada en el ingreso”.

Por eso, se dirigió a la Departamental de Policía a presentar el reclamo. Pero le dijeron, sin prestar mucha atención, que las directivas eran decididas desde el municipio y entonces debía dirigirse allí a presentar su queja.

El texto completo de su descargo es el siguiente:

“Hola...recién vuelvo de estar 48 horas de guardia. El viernes fui a Saladillo, estaban todos los accesos a la ciudad con montículos de tierra, solo se podía ingresar por uno, donde te pedían los papeles y te tomaban la temperatura tanto cuando ingresabas como cuando salías.

El sábado fui a 25 de mayo y pasó exactamente lo mismo, con la ventaja que además te rociaban el auto con hipoclorito de sodio.

Vuelvo hoy a Junín y no había nadie que controle nada, no había ninguna autoridad de nada en el ingreso. Así que como Juan por su casa entré a Junín como si nada.

Me sentí tan indignada que fui hasta la Departamental a hacer el reclamo. Estaban dos policías que solo me escucharon, y a las 10 de la mañana ingresaba al lugar el jefe, que al escuchar parcialmente lo que estaba diciendo, se hizo el desentendido y se fue para el fondo.

Exigí que me tomen los datos porque si no es como hablar con mi vecina. Y me dijeron que las directivas vienen desde la Municipalidad que lo ideal sería hacer el reclamo ahí.

Los médicos cuando se nos muere un paciente ruedan nuestras cabezas porque somos los responsables de las decisiones. El municipio es responsable de lo que nos pase a todos”.