Las mujeres siguen siendo el blanco preferido de los motochorros en Junín: con un accionar casi exprés, en distintas partes de la ciudad y en el marco de una metodología delictiva que no puede ser controlada, estos delincuentes ocasionan no sólo un perjuicio material a las víctimas, sino que también les provocan lesiones, en muchos casos.

Además, al menos en los tres casos que se conocieron ayer, hay otra particularidad común: los sujetos se manejan armados, de a dos, a bordo de motocicletas. No saben de zonas ni horarios: cualquier momento del día, aunque sea a plena luz, y cualquier parte de la ciudad son propicios para llevar adelante su accionar delictivo.

Poco después del mediodía, ayer se conoció la primera denuncia, radicada por una mujer que fue asaltada por dos motochorros que se apoderaron de su billetera. Para esto, la amenazaron con un arma de fuego. El hecho tuvo lugar en inmediaciones de Italia y Cichero.

Apenas poco después, otra vecina sufrió el mismo ataque, en Camino del Resero y Roque Sáenz Peña: dos ladrones armados, en moto, le llevaron su celular.

El tercer caso dio origen a la intervención de las fuerzas policiales y abrió la puerta a una honda preocupación por parte de vecinos. Pasadas las 21, sobre Moreno a metros de Lartigau, una mujer fue amedrentada por dos sujetos a bordo de una moto, que le arrebataron la cartera a punta de pistola.

Este hecho motivó una persecución policial a dos jóvenes de 17 y 18 años, que lograron ser aprehendidos en Primera Junta y Alvear, pero la víctima no los reconoció como los autores del hecho.

A pesar del creciente número de efectivos en la ciudad, resulta por ahora imposible la identificación y detención de los motochorros que andan desde hace tiempo por las calles eligiendo libremente a sus víctimas. Esto viene aconteciendo desde hace meses, sin que sea posible garantizar seguridad a los vecinos que andan por la ciudad.