La policía todavía no encontró al preso que se le fugó

A casi 24 horas de un hecho casi novelesco que sucedió en Junín, la policía sigue sin poder encontrar a Juan Ramón Ledesma, uno de los presos que estaba siendo trasladado a la Unidad Penitenciaria N° 49 y logró escaparse.

El individuo, involucrado en una causa judicial por robo calificado, era trasladado junto a otro detenido de apellido Nuñez, quien no intentó huir.

Ambos presos estaban siendo movilizados por la Unidad de Traslado de Detenidos Junín. Al llegar, cuando le dieron el ingreso por el puesto 1, cuando llegó la guardia de seguridad exterior de la Unidad Penitenciaria avisaron que en principio debían ser conducidos a la UP 13 para ser revisados por un facultativo.

Los sujetos eran trasladados por un vehículo policial tipo Partner, que no poseía los correspondientes cerrojos internos que se utilizan en móviles policiales, que impiden que las puertas puedan abrirse desde el interior.

Por eso, a pesar de estar esposado pero con el vehículo detenido, Ledesma abrió la puerta y se dio a la fuga, hacia la zona del barrio La Vaca por Camino del Resero.

El otro sujeto no imitó su conducta y permaneció en el interior de la camioneta, y a pesar de esto, los dos policías, un capitán y una agente femenina, no pudieron atrapar a Ledesma y el preso se perdió de vista.

OPERATIVOS FALLIDOS

De inmediato, la situación fue comunicada a la fuerza y se extendió el alerta. Se llevó adelante un operativo cerrojo por la zona, que no dio resultados. También se hicieron allanamientos por la noche, en domicilios de personas que son familiares o están relacionadas con Ledesma, pero tampoco pudo ser localizado.

Además de la alarma que ocasionó entre vecinos de la ciudad, sobre todo en los habitantes de sectores cercanos al complejo penitenciario, el hecho originó conflicto entre las fuerzas policiales y los jefes municipales encargados de Seguridad, que como primera reacción, pidieron sanciones a los dos uniformados responsables del traslado.

EN FAMILIA

Juan Ramón Ledesma, el sujeto que permanece prófugo, imputado por un hecho de robo calificado, resulta ser el hermano de Juan Carlos Ledesma, el autor del disparo mortal que acabó con la vida de Karen Campos, en un hecho que convulsionó a la ciudad en marzo del 2013.

El hermano del ahora preso que se escapó, fue condenado en el 2013 a la pena de quince años de prisión, por el salvaje robo ocurrido el 9 de marzo de ese año al kiosco “Carlito”, ubicado en Siria y Borges del barrio Belgrano. Ese Ledesma fue hallado autor responsable del delito de “Homicidio en ocasión de robo, agravado por el empleo de arma de fuego”, y autor responsable de los delitos de abuso de arma, amenazas agravadas, daño y portación ilegal de arma de fuego de uso civil, por hechos acaecidos con anterioridad en el 2011.

La víctima tenía apenas 17 años y falleció como consecuencia de las heridas de bala recibidas en el abdomen.

En agosto de 2018, se supo que quien había sido condenado como coautor del hecho (esperó en la moto afuera a Ledesma) César “El Pelado” Fernández, se ahorcó con una soga de fabricación casera, en la Unidad Penitenciaria Nº 3. Había recibido la pena 7 años y un mes de prisión.