Las fuertes ráfagas de viento y la intensa lluvia que azotaron la ciudad durante la mañana, provocaron grandes dificultades en la ciudad. Varios barrios sin luz, con las calles inundadas y sin otros servicios como provisión de agua, Internet o canal, fueron la moneda corriente.
Además, se cayeron cables, postes, carteles y árboles en distintas partes de la ciudad.
Tanto desde la empresa EDEN como por parte de las cuadrillas municipales, debió desplegarse un duro trabajo para reparar todos los destrozos.