Sociedad Siria de Socorros Mutuos Junín: Denuncia por discriminación

Decenas de descendientes de sirios y libaneses de Junín han decidido recuperar los valores fundacionales de sus antepasados, y para ello se han puesto en campaña para recuperar la Sociedad Siria de Socorros Mutuos de Junín (SSSMJ), entidad social, cultural y mutual fundada el 1 de marzo de 1927 y cuyo principal objetivo es agrupar a la colectividad, creando un sentido de hermandad y solidaridad, según explicó Pablo Osvaldo Merad (foto), uno de los referentes de la causa.

En los últimos meses se desató un grave conflicto entre gran parte de la comunidad sirio libanesa de Junín y un reducido grupo de la Comisión Directiva de la Sociedad Siria de Socorros Mutuos, responsables de manejar dicha institución durante décadas. Según los denunciantes, la CD jamás cumplió con sus objetivos sociales culturales y de mutualidad en relación a la comunidad de Junín, desvirtuándolos con otros objetivos sociales que no se relacionan a sus orígenes fundacionales. Por otra parte, señalan que ni siquiera abren las puertas ni dejan participar en la vida interna institucional a las familias de dicha comunidad para resaltar sus valores fundacionales estatutarios.

LA DENUNCIA ANTE EL INADI

Pablo Osvaldo Merad, junto a otros miembros de la comunidad local (Gladys Nani, Mónica Patricia Salim, Luis Rubén Sedran, Alfredo Ahmed Farha y Leonardo Abraham, entre otros) manifestó que esta situación “es como consecuencia de que poseen un Estatuto cerrado con un articulo netamente discriminatorio e inconstitucional que expresa que ellos pueden asociar o no y en caso de no asociar no tienen derecho a dar las explicaciones pertinentes, contraponiéndose a dos artículos del mismo Estatuto que dice que si un ciudadano es descendiente de sirios o libaneses, con trabajo honesto y es de buen nombre y honor tiene el derecho a participar dentro de la vida interna de la Institución como socio activo”.

“Por tal motivo –destacó Merad- lo que hacen con esa clausula totalmente inaceptable es digitar y manipular ‘cuando y a quienes asociar’, lo que ha llevado durante años a formar un club personal de amigos y a hacer una posición dominante de la Institución, como así también a digitar y elegir los cargos entre ellos mismos de manera permanente y casi eterna”.

“Toda esta situación ya fue denunciada en 2004 ante el INAES, ente totalmente amparado por su ex titular y oriundo de Junín, Patricio Griffin. Un funcionario amigo de los mismos a quienes no solo protegió sino con quienes  también ha realizado actos políticos y de gobierno dentro de la Institución junto a otros integrantes del FpV como el Diputado Carlos Kunkel, Aldo San Pedro y candidatos locales en su momento  (reconocido por ellos mismos en Expte. de INAES y en los medios gráficos de la época). Cuando estas actividades están prohibidas por Estatuto dentro de la Entidad”.

En relación a la discriminación, Merad refirió que “está basada en acciones u omisiones que realizan estas personas que manejan la Institución hacia nuestra comunidad o colectividad, creando desigualdades en el acceso a los recursos y a las oportunidades que poseemos por derecho estatutario y fundacional”.

“Existe desde ya un trato diferencial de estos personajes a nuestra colectividad, a base de manifestaciones o actitudes despectivas e injustificadas, por ejemplo eludiendo y no presentando pruebas sobre las bases y fundamentos de lo que no solamente se les denuncia sino también sobre lo que ellos mismos exponen. También difaman y desacreditan a miembros honorables de nuestra colectividad, tratando siempre de desviar el análisis fáctico de las pruebas presentadas”.

“Desde ya que existe actitudes o conductas desventajosas de estos directivos hacia nosotros, ya que percibimos de que somos tratados peores que otros por razones arbitrarias o parciales, cuando somos los legítimos miembros de la Institución por derecho Estatutario; y es por eso que acuden a la antilocusión o antagonismo escrito, es decir que sin pruebas acreditables y sin bases ni fundamentos lógicos demuestran libremente una actitud de rechazo acérrimo hacia los ciudadanos descendientes de sirios y libaneses de Junín. En el Expediente del INAES se puede observar cómo estos personajes utilizan un discurso provocativo o con tono de odio para algunos miembros de nuestra comunidad; aunque si bien el antagonismo verbal no es perjudicial puede llevar a preparar el escenario para desenlaces más severos, acción que jamás queremos”.

“Constatamos una actitud de evitación, donde esta gente evita activa y permanentemente a los miembros de la colectividad sirio libanesa de Junín para que ingresan a la Institución a trabajar y en calidad de socios; donde además de ocasionar un daño directo a la comunidad sirio libanesa ocasionan otros tipos de daños a través de la exclusión social; por lo tanto todo esto lleva a una neta discriminación, donde los ‘prejuicios’ de estos personajes ya se convierten en ‘acciones’,  que consisten en este caso en que la comunidad sirio libanesa de Junín sea discriminada través de la negación al acceso de oportunidades y servicios. Conducta que tiene la intención de poner en desventaja a nuestra colectividad para el alcance de metas y objetivos sociales, culturales y de mutualidad.

Actualmente hay actividades sociales que si bien algunas las aceptamos, como el tango y que desde ya la institución le cede a la Municipalidad el salón para tal fin; creemos que primero hay que priorizar los objetivos fundacionales de la Sociedad Siria de Socorros Mutuos. Por lo tanto pedimos al INADI que estos personajes nos asocien como socios activos; y desde ya seguimos luchando para que el INAES intervenga la institución y la normalice de una vez”.