LOCALES | 18 FEB 2024
EDITORIAL DE DOMINGO
Muevan la cola
Exaspera la inacción, cuando se requiere de proactividad; pero al ver a los actores, los mismos desde hace ocho años, se cae, indefectiblemente, en la decepción
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EDITORIAL PUBLICADO EN LA EDICIÓN IMPRESA Y EDICIÓN DIGITAL Nº 397 DE SEMANARIO DE JUNÍN. CORRESPONDE A LA SEMANA DEL 17 AL 23 DE FEBRERO DE 2024.
Mientras el Congreso de la Nación es un polvorín desde las primeras horas de este año, el Ejecutivo juninense “hace la plancha” a la espera de que alguien llegue y les solucione los graves problemas de la gestión.
Como en el Antón pirulero, cada cual atiende su juego, desechando la responsabilidad que asumieron de atender las demandas de una comunidad sumida en una gran incertidumbre.
La tarea del gobiernolocal, según lo expresan en sus gacetillas de prensa, está abocada a la atención de la colonia de los adultos mayores, el paso de una motoniveladora en alguna calle olvidada, el reconocimiento de deportistas, el punto de encuentro en la laguna seca o algún otro espacio libre. Y sigue el cotillón.
En una ciudad que según ‘wikipedia’ es “la más importante del noroeste de la provincia de Buenos Aires, Argentina (...) y “principal centro administrativo, turístico, educativo, de salud, industrial y comercial de la región”, la obra en marcha más relevante para el intendente es una hamburguesería.
No hay datos oficiales respecto a que algún funcionario (o varios) haya estado por estos meses interesándose por resolver –al menos- cuestiones que hacen al desarrollo del distrito, como por ejemplo las obras paralizadas, las más nuevas y las más viejas. Paso bajo nivel, viviendas, autopista a Buenos Aires, terminal de ómnibus. Un rosario que se repite.
Exaspera la inacción, cuando se requiere de proactividad; pero al ver a los actores, los mismos desde hace ocho años, se cae, indefectiblemente, en la decepción.
En las últimas elecciones,las mayorías han elegido aquellos discursos que promovían el fin de los privilegios político-empresarios, la eliminación de los ñoquis y de quienes están prendidos de la teta del Estado, sin embargo, hasta ahora son los únicos que siguen en la “zona de confort”, mientras barren con la de quienes los eligieron y también con la de quienes no lo hicieron.
