Uno de los primeros en zapatear y quejarse por la convivencia política con la LLA fue el intendente Petrecca, impulsado por la defensa de los cuestionamientos del espacio libertario local, que decidió contarle las costillas de cada hecho de su gestión.
En Junín el malestar se acentuó por la actitud de los concejales libertarios, que –según acusan– votan en sintonía con el kirchnerismo. “Hay cosas que votan juntos y con los mismos argumentos, en contra de nuestras iniciativas”, confiaron desde el oficialismo local.
Lo que ocurre en Junín también pasa en otros distritos. La queja central casi coincidente es que los jefes comunales sienten que el pacto político con los libertarios, anunciado semanas atrás, no se tradujo en acciones concretas. En sus distritos, la prometida articulación no aparece, y crecen las dudas sobre la voluntad real del oficialismo de respetar el lugar del PRO en los territorios donde gobierna.
“No hubo avances en casi ninguno de los distritos donde se gobierna”, sostuvo un dirigente del interior según informó el canal TN. Y otro fue más tajante: “Nadie nos dijo que no íbamos a tener la lapicera en nuestros distritos. Si es así, no creo que podamos acordar”.
Ritondo, que conduce las negociaciones con LLA, mantiene contacto fluido con los jefes comunales, pero reconocen que la coordinación con los libertarios en territorio es prácticamente nula. “Si no les bajan una línea, es imposible acordar”, señaló un intendente bonaerense con peso propio.
Este viernes habrá una videollamada previa entre varios intendentes del interior para ajustar posiciones. Participarán, entre otros, Jorge Etcheverry (Lobos), María José Gentile (9 de Julio), Marcelo Matzkin (Zárate), Juan Ibarguren (Pinamar) y Pablo Petrecca (Junín). Aunque cada distrito tiene su propio panorama, el reclamo es el mismo: la falta de respeto a la prioridad PRO en el armado de listas.
Desde Casa Rosada apuestan a que el sello de LLA sea suficiente para competir. Pero en el territorio el cálculo político es otro. “Eso en estas ciudades no lo veo. Van a sacar 15 puntos, generosamente hablando”, deslizó un alcalde PRO con desconfianza.
La advertencia de los jefes comunales es clara: “Si no se ponen de acuerdo y siguen ninguneando a los intendentes, es posible que vayamos separados”. Aunque hoy al PRO no le conviene romper, por los lugares que arriesga, no descartan esa posibilidad si no hay señales claras.
El tiempo juega en contra: el 9 de julio cierra el plazo para alianzas y el 19 para la presentación de listas. En las próximas semanas, los protagonistas deberán resolver si la alianza entre el macrismo y los libertarios se consolida… o explota.