SECCIÓN HIPHOP PUBLICADA EN LA EDICIÓN IMPRESA Y EDICIÓN DIGITAL Nº 477 DE SEMANARIO DE JUNÍN. SEMANA DEL 30 DE AGOSTO AL 5 DE SEPTIEMBRE DE 2025
Nombramos a varios de éstos, desde genios argentinos como “Chiqui” Vinyltracker o personajes históricos internacionales como Q-Tip y sus aportes para Nas en “Illmatic” o su increíble producción en el histórico grupo de Rap alternativo “A Tribe Called Quest”.
Aun así, el objetivo aquella vez fue demostrar justamente la importancia de estos artistas y a su vez reivindicar su arte en el intento de que no se siga desvalorizando.
Siguiendo esta línea, hace casi un año hablamos de un productor que quedó en los corazones y que no se puede evitar soltar un lagrimón cada vez que se lo menciona. Un hombre que hasta hospitalizado y en una camilla siguió haciendo música: J Dilla, aquel joven de Detroit que fue encandilando con sus obras, desde producciones para “The Pharcyde” hasta jugar con distintos ritmos con su grupo “Slum Village”.
En esa oportunidad hablamos del legado que dejó el estadounidense antes de partir; obras increíbles y recuerdos inolvidables como aquel “Donuts”, “Welcome 2 Detroit” o “Champion Sound” en colaboración del gran Madlib.
Entre ellos encontramos una obra póstuma llamada “Jay Love Japan” y aunque no tenga nada que ver con lo que hablaremos ahora, salta de igual manera como curiosidad ya que Seba Jun, más conocido con el seudónimo de Nujabes fue un productor japonés y uno de los responsables de la popularización de la música “Lo-fi”.
Más de una vez te habrás cruzado en YouTube alguno de estos videos recopilatorios bastante largos con el rótulo de “música para estudiar/relajarse”. Normalmente suelen ser temas instrumentales tranquilos con sonidos que nos invitan a la paz y el goce del momento.
Es ahí donde este japonés entra en escena. Dueño de dos disquerías en Tokio, contactó con la música desde joven. En sus obras se pueden encontrar desde samples de Frank Sinatra hasta algunos más inesperados como el brasileño Luiz Bonfá.
De ahí surgen varias obras en su haber: “Metaphorical Music” siendo su debut en el año 2003 y que recientemente cumplió 22 años. Un trabajo donde podemos encontrarnos desde raperos amigos suyos como Shing02, o incluso con músicos que se han aliado al HipHop gracias a Seba Jun, como es el caso de Uyama Hiroto.
Gracias a esta obra, tiempo después se le abriría la oportunidad de llevar a cabo la banda sonora del animé llamado “Samurai Champloo”, que al día de hoy es considerado como una de las series de animación con mejor instrumental existente.
Y así recorrió su vida Nujabes, manteniendo un perfil bajo, pero haciendo que los corazones de las personas se tranquilicen al escuchar su música. La realización que le siguió fue “Modal Soul”, quizás su obra más aclamada, intercalando en algunos momentos entre instrumentales la presencia de diversos cantantes depositando sus letras. Se hace notar la aparición de personajes como Shing y Uyama Hiroto, o como el caso de Terry Callier sobre las bases de Nujabes.
Lamentablemente, en el año 2010 y luego de un accidente de tránsito Nujabes pasaría al plano astral, no sin dejar antes obras que serían sus éxitos póstumos como resultaron “Spiritual State” en el año 2011 o “Luv(sic) Hexalogy” salido en 2015, el cual recopila esta obra que se dividió en tres partes alrededor de comienzos de los 2000 y años después serían unidos e incluso les agregarían remixes realizados por el mismo Nujabes.
Es triste la despedida de alguien tan emblemático como este excelente artista japonés, quien supo tener una afinidad particular con J Dilla (caso curioso que ambos nacieran la misma fecha y el mismo año) y mostrando ser uno de los mejores productores que ha pisado la tierra.
Tal es así que Nujabes -al igual que su compañero de Detroit- nunca serán olvidados.
Su influencia ha trascendido más de lo que se cree.
“Solo se muere quien se olvida” es una frase recurrente que se suele utilizar. Pero para este caso quedaría mejor decir que cada vez que alguien escucha una recopilación de “música para estudiar” ahí vive Nujabes con sus clásicos y a la vez curiosos samples de jazz y ese Rap relajante, que a tanta gente sigue ayudando.