

La puja interempresas por construir la obra del paso bajo nivel de las vías en la avenida Rivadavia de nuestro medio, registró un múltiple empate entre cinco oferentes que presentaron exactamente la misma cotización para tratar de quedarse con la obra.
Así lo explica un artículo del periodista Antonio Rossi, en el portal Letra P.
La nota indica además que“las ofertas se ubicaron un 15% por debajo del presupuesto oficial”, por lo cual ahora las autoridades de la ADIF (la entidad ferroviaria estatal encargada de las obras de infraestructura) se aprestan a definir al ganador por medio de un “sorteo” que se efectuará en los próximos días.
Como explica Letra P “la novela del pentaempate había arrancado en octubre pasado, cuando la ADIF puso en marcha la licitación con un presupuesto de referencia de 943 millones de pesos y un doble margen de aceptación de ofertas de -10% y +30% respecto de la valuación oficial”.
A esa convocatoria acudieron “seis oferentes: Pietroboni-Sabavisa, Vial Agro, Esuco, Centro Construcciones-WeiMaker, OCSA y la UTE Tecma-Pose” y “odas las cotizaciones sobrepasaron el piso inferior del 10% establecido en las reglas de juego”.
El periodista, puntualiza que ante la situación “el directorio de la ADIF que preside el massista y exintendente de General Pinto, Alexis Guerrera, resolvió habilitar una segunda ronda de mejora de ofertas y ampliar al 15% la brecha de diferencia negativa que se podía aceptar con respecto al presupuesto oficial” y allí “la UTE Tecma-Pose volvió a arrimar una oferta con un descuento superior al admitido, lo cual llevó a los funcionarios a tomar la decisión de sacarla de la cancha por “inadmisible”.
En tanto, los cinco competidores restantes coincidieron en aplicar la baja máxima permitida del 15% y todas las ofertas quedaron empatadas en un precio final de 802 millones de pesos.
Según Letra P “la presentación de ofertas por debajo de los presupuestos oficiales es un fenómeno que se viene registrando en los últimos meses tanto en las obras que licitan empresas y organismos nacionales, como en los proyectos que lleva adelante la provincia de Buenos Aires”.
Aunque claro, señala que “el truco de las empresas, según los especialistas, radica en presentar ofertas extraordinariamente bajas para poder quedarse con las obras y cobrar los anticipos. Al tiempo, comienzan los reclamos de una ‘redeterminación de precios’ para no interrumpir los trabajos que no se pueden costear con las cotizaciones iniciales e incrementar de ese modo el precio final de la obra”.