

El próximo miércoles a las 21, el elenco de Carlos Borrello enfrentará a Estados Unidos por la última fecha del certamen
El conjunto nacional realizó un primer tiempo donde cortó el circuito de juego de Canadá, tuvo un gran despliegue físico y fue paciente para encontrar las oportunidades en el al arco rival. La seguridad de Oliveros en el arco, la muralla de Cometti en el fondo, el aporte de buen fútbol que le brindó Lorena Benítez, la garra de Huber y la potencia ofensiva de Yamila Rodríguez y Jaimes fueron los picos más importantes en términos individuales.
En el comienzo de la segunda etapa Argentina se dedicó a aguantar el furioso comienzo de las canadienses. Para sumar un arranque difícil, Lorena Benítez se retiró lesionada cuando apenas iban 12 minutos. La única jugada certera de Argentina llegó a los 20, cuando Soledad Jaimes tuvo en su cabeza la más clara de todo el partido. La arquera canadiense le sacó un gol que hubiese sido un premio a una de las mejores jugadoras albicelestes. El aguante por el aguante mismo tiene su costo, y cuando ese aguante se quiebra en tiempo de descuento duele más. Luego de una jugada donde las argentinas no pudieron cerrar, Sarah Stratigakis la mandó al fondo de la red.
Al final del partido Borrello declaró: "Vinimos a ganar experiencia, tanto las jugadoras como el cuerpo técnico". Declaraciones que levantaron polvareda en el sector. No por la derrota, sino por las formas. Entre las críticas, a Borrello se le cuestiona que siga mandando a las futbolistas a intentar jugar de igual a igual sólo un tiempo; a no aprovechar un grupo de jugadoras de gran nivel; a la ausencia de Banini, la mejor que sigue sin ser convocada; y el desaprovecamiento histórico de una camada de futbolistas que están para mucho más.