El astrónomo, investigador y escritor Carl Sagan, decía: “Saber mucho no es lo mismo que ser inteligente. La inteligencia no es sólo información, sino también juicio, la manera en que se recoge y maneja la información”.

Este lunes 7 de junio se celebrará, como es costumbre, el Día del Periodista y más allá de seguir comprometiéndonos desde nuestro grupo empresario a informar responsablemente, lo cual nos ha permitido ganar en credibilidad en estos años desde la reaparición de SEMANARIO de JUNÍN, resulta necesario hacer hincapié en la “infodemia” que abruma a las comunidades y que se ha acrecentado tras la aparición del Coronavirus.

La cantidad de datos que circulan es abrumador, y como si fuera poco, se comparte innumerables veces a través de las redes sociales. Hay mucho contenido falso y no siempre es fácil identificarlo. Circulan todo tipo de consejos y recomendaciones, incluso entre profesionales de la salud, y, aunque muchos sin duda están bien intencionados, pueden resultar perjudiciales.

Esto dio origen a un nuevo término: “infodemia”, oficializado por la OMS para referirse a la otra pandemia que nos aqueja: la relacionada con la desinformación.

Por este motivo, mayor es la preocupación que debemos tener quienes desarrollamos esta profesión a sabiendas que las palabras crean los pensamientos y éstos van a determinar nuestra conducta.

La situación es grave cuando se incluye el exceso de distintas informaciones provenientes de investigadores y lo que puede resultar en la mala interpretación de un periodista poco entrenado frente a un público ignorante, cuando se debe considerar que la ciencia no es estática y que nuestras certezas de hoy podrán ser cambiadas en el futuro porque así avanza el conocimiento.

En este escenario tan complejo, entendemos que se necesita de voceros capacitados y eso es lo que intentamos aportar día a día con nuestra tarea y que se ve reflejada en la confianza prodigada por nuestros lectores, sin cuya fidelidad hubiera sido imposible el crecimiento.

Confiamos en que las empresas periodísticas y los periodistas podamos afianzarnos cada vez más en esta tarea del bien público, porque de eso se trata, a sabiendas que por estos tiempos tan difíciles que nos toca transitar a todos y cada uno, la “infodemia” puede producir incertidumbre, miedo y paranoia,  lo cual se transforma en emociones negativas como ansiedad y depresión, alterando más aún esta situación sanitaria imprevisible.

Por eso nuestra tarea seguirá estando a favor del desarrollo de Junín y su gente, cuidando que cada información vaya en ese sentido para favorecer al conjunto, pero particularmente a aquellos que resulten más vulnerables.