

La ciudad australiana que en 1992 perdió su candidatura por 'pequeña y desconocida' de Brisbane fue designada este miércoles como la sede para la organización de los Juegos Olímpicos de 2032, permitiendo al mundo olímpico preparar el futuro, a sólo dos días de la apertura de los Juegos de Tokio 2020.
Brisbane fue elegida por los miembros del COI, reunidos en su 138ª sesión en la capital japonesa, y sucederá por tanto a París-2024 y a Los Angeles-2028. Nunca antes la cita deportiva más importante del mundo había sido confiada con once años de antelación.
A 11 años de su inauguración, el ¡ 85 % ! de las instalaciones ya son una realidad. Serán los terceros Juegos en Australia.
Australia, entre los raros países en haber estado presente en todas las ediciones de Juegos de verano, es “una inmensa villa olímpica” con sus múltiples nacionalidades, orígenes étnicos y unos 300 idiomas hablados, señaló este miércoles el primer ministro del país, Scott Morrison, por videoconferencia.
El país sede los Juegos de 1956 de Melbourne, y después en Sídney 2000, que siguen siendo considerados como una de las ediciones olímpicas más exitosas tendrá una nueva oportunidad de mostrarse al mundo.
Su designación confirma también la tradicional rotación continental decidida por el COI, con Tokio-2020 (Asia), París-2024 (Europa) y Los Angeles-2028 (América), cuando África espera todavía sus primeros Juegos Olímpicos.
La región de Queensland, ya candidata en los Juegos de 1992 atribuidos a Barcelona y organizadora en 2018 de los Juegos de la Commonwealth, promete también “un 84% de sitios ya construidos”, un criterio clave desde que la instancia olímpica inició su caza para evitar instalaciones creadas y luego infrautilizadas.