Como siempre, el intendente Pablo Petrecca está ocupado de las fotos y de cómo lucir mejor para la gestión de marketing, el único plano verdaderamente importante de su administración.

Los profesionales de la salud vienen llevando adelante desde octubre reclamos por su recategorización y jerarquización, y desde el 4 están cumpliendo un paro por tiempo indeterminado que ha dejado sin atención a los sectores más vulnerables de la comunidad, que son los que concurren a las salitas barriales del municipio.

Sin embargo, ayer estos profesionales aguardaron a Petrecca en su secretaría por cuatro horas, pero él no se hizo presente. En ese momento, estaba ocupado posando para las cámaras en una clínica local, donde paradójicamente se entregaban diplomas a enfermeros recibidos y él brindaba un emotivo discurso revalorizando las prestaciones en salud. Sí, justamente las que no presta desde el municipio que lidera.

"Hoy vemos un claro ejemplo de que, cuando se trabaja en equipo entre las distintas instituciones, los resultados son siempre positivos y esto también es un claro ejemplo de que nuestra ciudad es líder en materia sanitaria, dando oportunidades en este caso a 38 personas. Este trabajo en equipo es el que tenemos que seguir pregonando para afrontar los desafíos que tenemos por delante, como el de fortalecer el clúster de salud para favorecernos todos en esta materia".

Con estas palabras se pronunciaba Petrecca ayer, mientras los profesionales lo esperaban, tomando una abismal distancia a los reclamos de los propios profesionales que deberían ser oídos en sus reclamos, al menos a través del diálogo que siempre pregona a través de la palabra pero jamás de los hechos.

Discurso que, como siempre, son una cáscara vacía de contenido. En el fondo, el intendente de Junín está totalmente desinteresado en prestar soluciones a profesionales, que con 15 años de antigüedad, cobran 38 mil pesos mensuales. Los sueldos municipales, salvo para el personal jerárquico, son una vergüenza. Y tampoco tiene reparos en dejar sin la atención primaria básica a miles de personas que solo pueden concurrir al CAPS más cercano a sus casas, porque no cuentan con otro ingreso ni posibilidad.

EL RECLAMO

Ayer, nuevamente por las redes sociales, los profesionales se pronunciaron y denunciaron esta situación increíble de la doble cara de la verdad: ellos aguardando ser atendidos por un Intendente que estaba ocupado entregando diplomas a egresados privados de Enfermería y hablando de la importancia de la salud.

“Acá muy paquete el Sr intendente de Junín, mientras le entregaba diplomas a las enfermeras que egresaban, lo esperamos 4 horas  en su secretaria personal algunos representantes de los casi 70  profesionales de salud municipal, que hace 8 días estamos parando por tiempo indeterminado.

A nosotros nos preocupa la gente, los niños niñas y adolescentes que no tienen atención, consejerías en salud sexual y reproductiva, atención psicológica, médico obstétrica y nutricional, hace más de dos meses  que iniciamos las medidas de fuerza.

Reclamamos una recategorización y ¿saben qué? Nadie responde, nadie, parece que a nadie le importa la salud pública, a nosotros sí. Vergüenza deberían sentir. Nosotros no, estamos orgullosos de nuestro trabajo, lo consideramos esencial  y prioritario. Después de los aplausos , viene este destrato.

Seguimos de pie.

Se olvidan que son funcionarios públicos, se olvidan que están ahí y deben explicaciones, y escuchas. Nosotros no”.