Por: Redacción Semanario de Junín

Para no modificar su rutina y evitar el estresazo, nada mejor que seguir aferrado al libreto: esto es, hacer poco, sonreír mucho, rodearse de amigos y ningunear a los quejosos.

Con esa fórmula, Alexia pasó una semana más de reinado. Intentó subir a los caballitos en Saforcity luego de haber revoleado un par de banderas en el sendero real, hablando de sus antepasados que según dijo, bajaron de un barco.

Así, entre la fiesta del inmigrante y la del peón del reino, el monarca amarillo consumió dos días más de su agenda que prioriza este tipo de actividades a gastar el traste en el sillón de Rivadavia y los zapatos en los senderos del reino, donde los pesares y los reclamos se multiplican por doquier.

Ningún desbole es suficiente para mover su amperímetro. Alexia sigue ocupado en menesteres superiores, comolas reuniones y  los viajes, pensando en el armado 2023, que lo tiene a mal traer. Es que se trata de encontrar el mejor postor, que le permita mejorar más su vida, y seguir revoleando su capa.

Mientras tanto, el reino languidece. Se mantiene en obra gracias a los encargues de Sir Alfer y Sir Kichi, (y menos mal) porque sino, lo único que habría en el pago, serían lamentos. Bueno, que igual los hay, porque con la cantinela de la discriminación, Alexia se las ingenió para hacer la plancha todo este tiempo, tanto que ni siquiera puso el techito en la entrada a la laguna real, que sigue sin el alero desde hace varios años.

No es el único ejemplo: Alexia prometió varias obras pero quedaron en su imaginación: ni los biciclos, ni as posadas, ni tampoco los senderos. Nada, ni una sola hizo, salvo tirar un poco de pintura en algunas esquinas. Eso sí, uno de sus fieles sialexistas pidió por la vuelta del ‘vendaval’ de obras, que según dijo, pasaron por el reino en de Amarillo I ‘cuando la cosa iba en serio’. Bueno, como habrá sido de serio todo, que a Amarillo I lo rajaron a patadas y el mejor equipo de los últimos años dejó un desastre de magnitudes que aún hoy repercute en todos lados. También en el reino de Alexia, donde todos parecen cortados por el mismo molde, que va de la inacción a los lamentos.

Mientras los reyes de la zona muestran sus avances, Alexia se golpea el pecho que su región es la mejor, la más dotada, la más estratégica, pero nada dice que es la peor administrada y la que peor futuro tiene, cuando quien gobierna, ningunea de lo lindo.

 

PetrEgo

En la Fiesta del Peón Rural, mostró más los dientes él, que el yobaca. Pobre, ni se enteró a quién tenía al lado, sino hubiera corcoveado. Bueno, el noble animal (el caballo, el caballo) no tiene ni maldad ni segundas intenciones, como el que lo acariciaba buscando simpatías para la foto.

PetrEgo aprovechó los festejos en Saforcada y en la plaza de los Inmigrantes para aflojar un poco con tanto viaje y tanto candidato, en tiempos de armados pensando en el 2023. Claro, es entendible, debe ser estresante andar a las palmadas y sonrisas con cada uno que podría ser el caballo del comisario, que mejor no quedar pagando.

Por eso, para entrenar en estas lides –de las que ya aprendió bastante- nada mejor que posar junto al de cuatro patas, y mostrarse ganador.

Porque al fin y al cabo y aunque Ciudad Fría abunde en la apatía y no tenga obras ni proyección a futuro porque no hay proyecto, nada mejor que poner dos gazebos y un par de jueguitos para los nenes, y que el sol siga acompañando.

La fórmula es simple: rezongos por lo que falta y silencio por las miserias propias. Todo es culpa de ellos, que no lo quieren ni un poquito y no paran de tirarle barro.Bueno, siempre y cuando no insistan en mostrar que lo único que hay es lo que ellos hacen. Ahí sí que se pudre todo, porque es imposible tapar el sol con las manos, aunque el disimulo permita seguir ganando días de lo lindo.

 

Te contamos todo lo que NO HICIMOS esta semana

*) Colocar los nomencladores de calles que prometimos.

*) Contar que eso de las bicisendas y ciclovías era joda. Miren si las íbamos a construir.

*) Cambiar de sentido las calles de tierra. Pa joder nomás.

*) Explicar si las camaritas sirvieron para ‘ordenar’ el tránsito o al menos, contar la que sumaron de recaudación.

*) Festejar un cumple en un pelotero. Venimos de fiesta en fiesta y la verdad, ¡cómo nos gusta!

*) Entregamos 132 escrituras a familias juninenses y firmamos otras 286. Ah, ¿Por iniciativa de Axel? Bueh... ¿pero salí en las fotos? Listoooo, dale que va.