

Por: Redacción Semanario de Junín
Desde hace años, Alexia es un mero administrador de una pobreza selectiva. La que le permite contar los acres generosos que deposita en los bancos del reino, mientras mira de reojo, como los de las afueras se deshilachan al abismo. Sin inventiva, imaginación, trabajo, generosidad, esfuerzo, solidaridad ni empatía; su apatía lo hunde cada día.
Alguno recordará que fue este rey quien ninguneó las necesidades de un grupo de desposeídos que reclamó en la plaza central del reino, por días y días por su techo, sin que se le moviera un pelo; hizo lo mismo con un grupo de jubilados, a los que intimidó con su cuerpo policial para que dejaran de reclamar. Fue quien prometió, - y no cumplió- las interminables 25 posadas para su gente. El mismo que se llenó la boca con promesas y las olvidó todas. También sus obras, las viejas y las nuevas.
Aunque, pese a todo, tuvo suerte. Primero por el virus de la corona que le dieron la excusa perfecta para dejar pasar el tiempo, criticar a los demás y hacerse el gil por las carencias y miserias propias. ‘Todo hubiera sido distinto, dijo alguna vez, si en este reino, ellos no estuvieran. Son el caos, el mal, y algunas cosas más’, agregó culpando a terceros.
No es de extrañar piense de ese modo.Alexia es de esa clase de reyes que llegó al sillón culpando a los demás.El problema, es que ahora ocupa el trono de los que debieran encarar las soluciones y en lugar de gestionar, pasa sus días pensando en su futuro. Hoy el tiempo apremia, los acres ya no están y la paciencia es un bien en retirada. Los de las afueras están que trinan y no hay quien los calme. Pero todo eso, a Alexia le importa nada.
En el reino hace rato se viven tiempos complicados. Son los que aparecen, inevitablemente, cuando un rey se dedica a mirar su sonrisa en el espejo, viaja con sus amigotes y se olvida de pisar el mismo barro que ayudó a generar. Porque una cosa es decir, y otra muy distinta, hacer. ‘Mejor que prometer es realizar’ dijo hace mucho, un rey al que muchos, quisieron un montón. No hace falta aclarar que Alexia no llega ni siquiera a integrar el banco de suplentes de ideas como esas, ni de otras, que brillan por su ausencia.
Alexia integró el mejor equipo de los últimos años, un equipo que viene perdiendo por goleada. Es el de la tormenta amarilla, el de Amarillo I, que aseguró iba a generar una revolución de la alegría.
No hace falta aclara que nada pasó. Porque por estos lados, se lo puede ver a Alexia sosteniendo un candil en su mano, asegurando ser un faro, en medio de la oscuridad sin tener un poquito de vergüenza.
PetrEgo
Si bien fue el 14 de febrero pasado, PetrEgo busca seguir enamorando a sus seguidores, sin olvidar que hace años se enamoró del cargo y la buena vida.Viajó, volvió a viajar, y cuando llegó, desarmó la valija para volver a armarla. En los últimos días, estuvo más afuera que en su casa: recorrió Rivadavia, Pehuajó, Gral. Villegas y Trenque Lauquen, y semanas atrás Mar del Plata, Vicente López y CABA.
Si alguno pretende seguir su rastro es fácil. Hay que buscarlo en las redes; a veces inunda su Twitter con imágenes de cumpleaños, reuniones con nenitos de jardín de infantes y sonrisas con Larreta y con el libro de ex jefe Ojitos de Cielo.
Mientras tanto, disimula haciendo que hace, igual que hizo lo que hizo todos estos años. En medio de quejas y lamentos la pasa bomba, relatando los problemas, culpando a los demás y evitando contar que es parte del problemacuando debiera ser parte de la solución.
Desde que descubrió que la sonrisa y la crítica garpan, ése es su proyecto político. Que se resume a eso: disfrutar su cargo, beneficiarse de él, decir que ‘gestiona’ y que ‘las cosas no salen porque no lo quieren ni un poquito’.
Podría, PetrEgo, ya que anda de viajero, además de recorrer la zona, ver cómo otros hicieron viviendas, atrajeron fábricas, industrias, construyeron calles y mejoraron la vida de sus habitantes.
Bueno, podría pero mejor no, porque se quedaría sin excusas. Descubriría que en lugar d la queja, la solución pasa por el trabajo. En lugar de declamar. Justo su mayor carencia, que deja al descubierto porqué todo está como está, y no como cuenta su verdad, lejos de la realidad.
Te contamos todo lo que NO HICIMOS esta semana
*) Transparentar la web de…transparencia municipal.¡Ni en pedo!
*) Rezarle a San Expedito y San Axel-Ferdito para que el olvido no se vaya, así seguimos como estamos.
*) Hacer alguna obrita. Nada, estamos medio depre, pero ya se nos va a pasar. Unos meses antes de las elecciones, le sacudimos con todo.
*) Pintar más sendas peatonales. Es que falta tan poco para que las pisen y facturemos que nos da cosita.
*) Recordar todas las promesas que olvidamos: ciclovía, bicisenda, reforma de avenida San Martín bueno basta, cortá ahí. jijji.