

En la tarde de este martes 22 un productor que sería de apellido Guruceaga, fumigó al lado de las viviendas del Paraje La Agraria sin estar autorizado a llevar adelante semejante acción.
Según trascendió, el hombre había sido advertido de que no podía realizar la tarea debido a la acción de los vientos que en ese momento eran discontinuos y de diversa variabiidad. Sin embargo haciendo caso omiso al aviso igualmente llevó a cabo la labor la cual fue captada en fotos y filmación. El productor en cuestión ya había sido multado hace un año por una falta similar y había sido condenado al pago de una multa.
En este caso no se supo si se le realizó la correspondiente infracción y si por consecuencia será suspendido en dichas labores debido a su reincidencia y virtual desacato.
Esta actitud de soberbia y arrogancia es moneda corriente en las áreas rurales donde cualquiera hace lo que quiere con la fumigación de agroquímicos como así también a la hora de desechar los envases que se ven a menudo tirados en los caminos.
Lo peor de todo, es que el gobierno petrequista ya ha reconocido su imposibilidad de controlarlos y parece una película del lejano oeste donde los poderosos se imponen sobre el resto.