

Por: Redacción Semanario de Junín
Pasó la semana de carnaval y Alexia se sacó al antifaz. Empezó a mostrar su verdadera cara, la razón de su existencia y su ambición personal quedó puesta en evidencia.
Desde que los amigos de colores de otros reinos decidieron empezar a mover sus fichas en pos de sus apetencias personales, Alexia hizo lo suyo, acompañando el circo, para no quedar afuera. Después de todo, a los compañeros de ruta se los acompaña y mucho más si fueron los que permitieron gozar de la buena vida. Porque desde que Amarillo I le abrió la puerta, Alexia cambió de vida.
Y desde entonces, con la misma cantinela y las mismas ausencias y olvidos, quedó pegado al sillón que le dio el mejor pasar. Gracias a ello cambió en tiempo récord posada por palacio; mishiadura por buena vida, amigos de barrio por reuniones con reyes poderosos…y varios etcéteras más que lo pusieron en otra posición.
El problema que solo utilizó las buenas armas de la política para el circo propio. Primero apuntaló su vida, enseguida la de sus parientes y amigotes y después inundó de promesas a los de las afueras, diciéndoles que detrás de eso, venían ellos.
Y si bien algunos le creyeron, el tiempo se encargó de confirmar las peores sospechas y la cruda realidad: miles siguen tapados de tierra, otros sin candiles, sin trabajo, sin poder comprar lo básico para poder vivir mejor y aguantando las mismas promesas de esos viejos tiempos.
PetrEgo no tiene corazón ni empatía. Bueno, el mundo amarillo siempre fue así. Mucho cotillón y circo, y poco trabajo. Desde que Amarillo I inauguró sus días de descanso por el descanso mismo, Alexia y todos sus amigotes replicaron esa idea que en muchos casos, sigue hasta nuestros días. Es que tampoco tienen mucho más que eso. Porque la gestión requiere imaginación, trabajo, y más trabajo, algo a lo que ese universo de colores, no está habituado a realizar.
Por el contrario, su mundo es el retrato y la sonrisa, por lo que este tiempo de carnaval les cayó como anillo al dedo: la diversión metió una pequeña cuña a los pesares de este tiempoy ayudó a pasar un poco mejor los últimos días.
Comenzó la recta final rumbo alos sillón del deseo, todos empezaron a mover sus fichas y hasta a ‘hacer que hacen’, para captar las simpatías. Alexia sabe jugar a la mancha con las liebres y mientras le tiró flores al amigo Colo Santi, mandó un par de máquinas del reino a sacar un poco de tierra al costado del camino real rumbo a la laguna para decir que, finalmente, hará el camino para los biciclos.
Empezó la carrera del 2023, y viene un tiempo de ausencias, las de siempre, y de promesas, renovadas, como siempre.
Ojalá también llegue el momento del apuro de todo lo pendiente y que Alexia se acuerde de su gente, de los de las afueras, olvidados de siempre, allá lejos del centro, de su centro que tanto quiere y dice es el más lindo del mundo.
PetrEgo
Llegó el tiempo de slogans de campaña y de bravuconadas en las redes. De acompañar a los amigos y de criticar lo que sea que sea ajeno. Se largó la carrera al 2023 y ninguno quiere quedar afuera.
PetrEgo empezó a mostrar sus uñas de guitarrero y a prometer que si los suyos llegan, nuestra vida cambiará. Que después del esfuerzo, vendrá la calma y la felicidad. Que no faltará el trabajo, no habrá más inflación y comeremos perdices.
PetrEgo ya se subió al carro que lleva a uno de los caballos del comisario y empezó a replicar como loro barranquero cualquier consigna, en sintonía amarilla y a tono con su gente. "Falta Menos" escribió el jefe comunal PRO de Ciudad Fría acompañando el mensaje de campaña de su amigo Santilli.Y desde la vereda de enfrente le sacudieron los piojos recordándole viejas historias del pasado y de dolor.
Mientras tanto, la vida sigue, los precios no dan tregua, se hace complicado vivir y la preocupación de PetrEgo y su gente, es solo criticar para llevar agua para el propio molino.
Sueñan que nadie recuerde lo que fueron y lo que hicieron. Que ninguno haga memoria y piense que no hace mucho, estuvieron y dejaron por el desastre que es presente y no se va. Que fueron la raíz de los males que hoy critican sin ningún desparpajo y disimulo.
Con problemas de memoria y sin un poco de vergüenza, PetrEgo y compañía empezaron a repetir que son la solución. Menos mal que al menos esta vez eligieron bien el slogan de campaña: “Falta Menos”. Sí, falta menos para que se den cuenta que el desastre que provocaron no se olvida.
Te contamos todo lo que NO HICIMOS esta semana
*) Acomodar, o aunque sea nivelar las calles de los barrios camino a la laguna. O comprar un tanque para transitarlos.
*) Poner los nomencladores de calles en los barrios.
*) Dejar de declarar obras por campaña y encararlas por gestión.
*) Seguir con la ciclovía al balneario. Ah, ¿fue para la foto?
*) Dedicarle un poquito de cariño a la plaza 25 de Mayo. Un poquito, está cerca, enfrente de la Muni.
*) Ponerle ganas a la gestión. Trabajo. Así pueden empezar a decir que ‘gestionan’.