El secretario general de UOCRA Junín, Eduardo Diotti, mantuvo un encuentro con el ministro de Infraestructura y servicios públicos bonaerense, Gabriel Katopodis, quien a través de su tarea ha adquirido un rol relevante en la provincia con el objetivo de seguir adelante con las innumerables obras que el gobierno nacional dejó paralizadas tras llegar al poder el 10 de diciembre pasado.

Frente a la inacción municipal del intendente Pablo Petrecca que dice hacer gestiones para el distrito pero se lo ve en las fotos compartiendo la “rosca política” de su partido, el PRO; Diotti ante la desesperación de las bases que perdieron el empleo salió a buscar refuerzos en la provincia, un ámbito en el cual el acalde de Junín y sus adláteres, siguen chicaneando y elevando la temperatura con el gobernador Axel Kicillof.

Diotti dijo a SEMANARIO, que durante el encuentro mantenido con el funcionario (que pasó de ser ministro de la nación a ocupar un rol similar en la provincia), le trasladó la inquietud de revertir la actual problemática y le llevó un listado de las obras que hacen falta terminar no sólo a nivel local, sino también regional y que eran las que generaban un importante movimiento económico que afectaba de modo positivo a los trabajadores de la construcción, pero también a una diversidad de sectores que ahora se encuentran paralizados y abarcan tanto a obreros, como pymes y comercios.

Entre esas tareas se encuentra el espigón del balneario municipal que fue clausurado por la administración Petrecca hace más de ocho años y que todavía no fue reestructurado en su totalidad, mientras que presenta serios defectos de terminación tal como lo mostró nuestro medio en ediciones anteriores.

También en la lista de la “espera eterna” se encuentran las 25 viviendas iniciadas en el gobierno de María Eugenia Vidal, luego discontinuadas, vueltas a empezar con Kicillof y vueltas a pararse.

Si hablamos de las obras a nivel nacional, una inquietud que también llevó Diotti a Katopodis, se encuentra el paso bajo a nivel de Rivadavia, la travesía urbana de Junín en ruta 7, mejoras en la ruta nacional 188 (el peaje aumentó 300% en ambas carreteras nacionales), las colectoras que están abandonadas en su totalidad y las 149 viviendas del Procrear, algunas de ellas al 90% de terminación y otras en un 30%, que constituyen un lamentable monumento a la desintegración política del país, al que se le suma la “terminal (de ómnibus) interminable”, otro de los grandes fracasos de la gestión Petrecca que en lugar de bregar por la continuidad de las tareas, elige posicionarse políticamente para no perder los privilegios propios y familiares.

Diotti explicó que en esta visita “le dejamos en claro al ministro el compromiso de nuestra seccional para facilitar todo lo que sea necesario para destrabar esta situación”, que generó una caída estrepitosa del empleo a punto tal que el sector de la construcción es uno de los más afectados tras la llegada al gobierno por parte de Javier Milei.

En tanto, Katopodis viene recorriendo la provincia para constatar “in situ” las diferentes situaciones y hace poco estuvo reunido con el flamante jefe de Gabinete nacional, Guillermo Francos, al que le solicitó el traspaso de obras nacionales al gobierno provincial con el fin de poder ser concluidas, todo ello debido a la política mileísta, apuntada a reducir al mínimo la presencia del Estado en la vida de los argentinos, con todo lo que ello implica para sus habitantes.