

El gobierno nacional decidió dejar sin servicio de tren a los municipios de 9 de Julio, Carlos Casares y Pehuajó tras suspender el ramal que las une con la estación Once ubicada en Capital Federal. La medida entrará en vigencia a partir del 1 de noviembre.
Una vez conocida esta decisión, desde la agrupación “Amigos de la Estación 9 de Julio del tren”, los vecinos expresaron: “Queremos que los vecinos comprendan la importancia del tren en nuestra comunidad. No es solo un medio de transporte; es una parte de nuestra identidad”. Por ello, convocaron a 'abrazar la estación' este 27 de octubre a las 23.45hs. El punto de encuentro será la misma estación de tren de 9 de Julio.
Cabe recordar que el servicio Once – Pehuajó era uno de los pocos que no se habían perdido ni siquiera con el desguace de Ferrocarriles Argentinos en la década de 1990, porque fueron sostenidos por Ferrobaires, empresa creada por el entonces gobernador Eduardo Duhalde que permitió salvar los trenes de pasajeros en territorio bonaerense.
Esta clausura “por goteo” ofrece grandes similitudes con la estrategia implementada por la gestión de Guillermo Dietrich entre 2015 y 2019. A diferencia de lo ocurrido en el menemismo, cuando la clausura de ramales era al por mayor y se hacía de forma explícita, se optó por una estrategia de silenciosas clausuras parciales y paulatinas.
No se trata del primer servicio eliminado por la actual gestión: además del citado tren a Pehuajó, en lo que va del año ya fueron suspendidos los trenes a Palmira (Mendoza), Justo Daract (San Luis) y el expreso a Rosario. A esto se suma el recorte de servicios en otros corredores que continúan circulando, como el caso de Pinamar.